Estaba atenta a que papá terminará la llamada, dijo que era mi madre, en lo personal, queria que tardará más, tengo siete años de no verle, es lo mínimo que espero, tres semanas mínimo.
El parecía estar muy atento a sus palabras, y yo muy atenta a sus gestos, al menos hasta que Maximoff entró.
Una delgada capa de sudor cubria su frente, entro con una camisa de tirantes, con shorts deportivos y tenis a juego. Al parecer venía de entrenar, aunque a las nueve de la noche?
Pareció buscar algo en el refrigerador, sacó una botella de jugo y se dedicó a beber de ella, el contenido se acabo en segundos, valla sed voraz. Cuando terminó; enroscó de nuevo la tapa a la botella, busco un momento el basurero, miro a todos lados tratando de encontrarlo más no pudo, me miro como diciendo "donde está?" Y yo solo le señalé un pequeño lugar bajo la barra, donde se encontraba el basurero, el pronto se inclinó y tiro la botella.
Papá colgó el teléfono y por lo tanto me dirigí a verle esperando una buena noticia—van a tardar unas semanas más—informó, yo trate de reprimir una sonrisa, pero no pude, mi boca se extendió enormemente en una sonrisa de felicidad
—pareces psicotica—dijo mientras guardaba su celular en el bolsillo
—es un pequeño don que e heredado—entonces el sonrió de lado
—y no fue de tu madre—aseguró saliendo de la cocina.
Sólo quedamos Pietro y yo.
Se dio la vuelta, quizá para lavarse las manos, entonces yo aproveche para mirar.
Tenía una ancha espalda, y definitivamente no era un adolescente flacucho, para nada pajiso, sin duda tenía piernas fuertes, y para ser sincera, quizá tenía más trasero que cualquier mujer que haya conocido.—podrías dejar de mirarme? Tu mirada es pesada amiga mia—dijo aun de espaldas, de inmediato dirigí la mirada a otro lado. Dios! Porque se daba cuenta? Tenía ojos en la espalda o que? Aunque no lo creo, no los vi en mi profunda analizacion.
Se escuchó como la puerta se volvía a abrir, de ella paso Adam con una caja de lo que parecia ser Pizza, entro y la dejo en la barra con brusquedad, la mala actitud estaba desbordante en el—alguien pidió pizza y no dijo, tuve que pagar—informó de mal humor, Pietro saco lo que se me antojaba como una cartera de piel, de esta sacó unos billetes y se los dio a Adam
—fui yo—aclaró, abrió la caja y sacó un pedazo, el cual me lo dio a mi—para la señorita—
Valla detalle, sonreí por las palabras, no fue una sonrisa de tal enamorada, más bien fue una de sorpresa, "para la señorita". Sacó otro pedazo y se lo dio a Adam—gracias por resivirla—agradeció y sacó otro pedazo para el, lo mordió con ansias, tenía hambre definitivamente.
—te la comerías toda si pudieras no es asi?—dije viéndole masticar
—no me retes—pido, su respuesta me sacó una gran sonrisa, tenía que admitir que Pietro era una persona agradable, amistosa quizá, pero me gustaría verle molesto alguna vez, conocerle de todas formas posibles.
-como eres cuando te enojas?-pregunte queriendo sacarme de dudas
—tira la pizza y lo sabrás—eso era una propuesta? Para mi era una propuesta. Me incline un poco decidida a hacerlo, coloque mi mano en la parte trasera de la caja, un empujoncito y caería.
—no—negó tomando mi mano, entonces yo le mire desafiante-porque me quieres ver molestó?-preguntó
—simple curiosidad supongo—respondi, entrecerro los ojos como no creyendo y pensando que había un Haz bajo la manga, entonces empuje la caja.
Pero con su estúpida velocidad la detuvo antes de que cayera al suelo—molesto no soy muy diferente—respondio colocando la caja de nuevo en la barra—sólo estoy serio con todo, celoso es el caso—dijo, con que celoso, nueva curiosidad, como era cuando se ponía celoso?
—y como eres celoso?—pregunte, el sonrió ampliamente sacando un segundo pedazo de pizza
—ponme celoso y lo sabrás—respondió, interesante, pero dudo de que haya forma alguna, el hecho de que tuviéramos alguna relación de amigos, si es que la teníamos, no significaba que podía ponerlo celoso, quizá los hombres no son como las mujeres, si ellos ven a su mejor amigo hablando con otro no se ponen e histéricos y van para decirles "alejate de mi amiga perra, o te mató estúpida, porque yo no se lo que quieres, porque si tu le hablas a ella lo que va a pasar es que te vas a morir, yo no se como pero te vas a morir" quizá no decían eso
La voz de papá interrumpió mis pensamientos, parecía estar llamándonos desde la sala. Pietro y yo cruzamos miradas, como diciéndonos "que pasa?" Aunque era más que obvio que ninguno de los dos lo sabía.
Salimos a paso apresurado, al menos yo, todos estaban ahí, incluso Spencer, quien parecía estar jugando a cosas de disparos, pase entre Mateo y el menor de mis hermanos para ver de quien se trataba la visita, ya que el grito de papá informaba que alguien invito a alguien sin avisar o siquiera preguntar si podía invitarle.
Me topé una una mujer, alta, de cabellos castaños y manos mágicas, Wanda, me saludo alegremente en un abrazo—Pietro me llamó, pido que viniera—informó
—y desde cuánto tu novio dice quien viene y quien no?—preguntó papá
—no es mi novio—negué, pero subconsciente y vocecita metieron manos en el asunto diciendo "no aún ndkfmskxlslz"
—quien es el Sugar Daddy?—preguntó Wanda viendo a papá
—Luckas Devalk, puedes decirme Luck—se presentó ofreciéndole su mano, ah no, no quiero a Wanda como madrastra, nono
"Como cuñada está bien" dijo subconsciente, el caso es que subconsciente no cuenta.—un gusto Luck, Wanda Maximoff—dijo con lo que me parecía ser ¿coqueteo? Le estaba coqueteando a mi papá?
—mi padre—informe, entonces ella se me acercó un momento para hablarme al oído
—no se puede evitar notar el parecido—comentó, después se acercó a mi y me susurró al oído:
—seré una gran madrsatra—dijo, pero tarde en procesarlo, MADRASTRA!? A NO NONONONO.
Los ojos de me abrieron como platos, nonono no gracias así estoy bien.
Pietro se adelantó para hablar con Wanda creandose su círculo privado, pero podía distinguir algunas plabaras, no muchas departe de Pietro porque el parecía ser más discreto, pero de parte de Wanda las cosas era...diferentes.
Distinguía algunas como "no será dificil" de parte de Pietro, y otras como "estas seguro?" Y pietro asentía enérgicamente, como si estuviera muy seguro de lo que fuera que quisiera hacer.Estuve tratando de decifrar lo que decían hasta que Wanda hablo en un tono alto.
—seremos cómplices, como cuando éramos niños, recuerdas? Con Victoria, ya sabes la de quinto año—dijo ella, Pietro sólo le hizo una seña de que se callara
—cómplices?—pregunte, antes, mucho antes de esas palabras logré distinguir que Mateo estaba involucrado.
Wanda me vio y me dio un guiño, esto era tan sospechoso.
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Ocean Eyes »» Pietro Maximoff y Tu
Science FictionQue tan lejos puedes llegar? y que tan rápido puedes ir?