Entrevista

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Convencerlos no fue tan difícil, convencerlos de que Pietro viniera conmigo sin segundas intenciones fue lo difícil.
Pero pronto estuvimos en mi casita, se sentía tan bien, acurrucarme de nuevo en mi camita, abrazar a mi mamá cuando huele a galletas recién hechas, que mi papá me cuente sus historias, pequeños placeres de la vida

—es tu sugar Daddy?—pregunto Pietro cuando vio a mi padre, ya tenía sus años pero no se veia muy debil que digamos

—es mi papá idiota—dije mientras que camiaba a el, al parecer estaba arreglando algo de una simple camioneta, una Lobo, Harley, doble cabina, de un color plateado, a simple vista era imponente y esas cosas le gustaba a mi papá.
Papá nos recibió a mi y a mis hermanos con brazos abiertos pero cuando vio a Pietro las cosas cambiaron

—y tu eres?—pregunto viendo a Pietro, este antes había dicho "Buenos días", paso saliva, se sentía raro al parecer

—Pietro Maximoff—trato de sonar firme, pero no salio muy bien, se le salió el gallo

—es un amigo pa, lo traje como cualquier visita—dije, al parecer mis palabras ayudaron a Pietro, el estrecho su mano con la de Pietro

—y mamá?—pregunto Adam

—adentro, preparando el almuerzo—informo y después pasamos, Pietro aún se sentía extraño porque incluso traía una maleta con el.
Cuando entramos escuchamos el ruido de la televisión de la sala, encendida aunque nadie la estuviera viendo, además, el chispoteo del aceite cuando se freía algún alimento, Mateo no tardó en apresurarse a la cocina, el le tenía un amor especial a mamá.
Pronto se escuchó un "Buhhh!" Y el grito de sorpresa de mamá, yo seguí los pasos de Mateo.

—Wenas! Se puede!?—dije entrando a la cocina

—_____!—se lanzó en un abrazo, abrazo que yo correspondi

—porque no avisaron, su padre hubiera ido por ustedes—dijo mirándonos a ambos

—de hecho nos trageron en nave y eso—informo Mateo

—ya veo, y Adam?—pregunto

—de seguro le está llamado a Clarie, así que prepárense porque tendremos compañía—dije tomando una manzana del frutero

—ahh si, así como tu con Pietro—dijo Mateo tomando mi manzana, saliendo de la concina, su plan diablico se llevo acabo, y mamá ya me estaba mirando atentamente

—quien es Pietro?—pregunto, entonces yo pase saliva, como explicarlo sutilmente sin que crean que es mi novio o algo así

—es.......un amigo que hice, y....lo traje para conocerlo más...—más bien parecía que quería conocer su entrepierna, mamá me miro sospechosa, así que de nuevo abrí mi boca-quizá debamos darle el cuarto de huéspedes-agregue

—es obvio no? Ni modo que se quede en tu cuarto—dijo buscando una reacción mía, yo no era de traer muchos chicos a mi casa, solo traía a Megan y ya.

—si...entonces...lo llevaré...—salí de la cocina y su ambiente incómodo, Pietro estaba paradito en medio de la sala, con la maleta en sus píes, observando todo

—Adam! Deja de ser hoto y ven a saludar a mamá!—le grité a mi hermano desde el primer escalón, y luego me volví a Pietro, que me miraba atentamente

—ven, te mostraré tu habitación—dije, el tomo su maletita y subió, detrás de mi

—me gusta tu casita, se siente acogedora—comentó

—no es mía, es de mis padres—corregí, sus pasos pararon, así que me giré para verlo, había parado en seco—yo conseguire una casa y esa será mía, esta es de ellos—trate de aclarar, se volvieron a escuchar sus pasos por lo que supuse que lo entendió.

Ocean Eyes »» Pietro Maximoff y TuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora