Hija de la tierra.

Alas libres.

-Mis padres me tienen bajo amenaza, yo no quiero ser un árbol, he pasado tanto tiempo dormida que ya jamás quiero volver a cerrar los ojos, no soporto estar en la oscuridad, mis compañeras dicen que es miedo, yo no se que es el miedo, ya han pasado 4 años desde mi llegada y no puedo aún enseñarle a mis hermanos a cuidar a nuestra madre, desde que llegue dicen que soy una niña loca, que una niña bonita como yo no debe protestar contra las actitudes del hombre porque Dios me castigará. Ellos no sabes que los dioses no castigan sino que ellos ¡enseñan!
Mi madre más ha dicho que me entiende completamente, que alguien que se ve tan joven como yo la tratan como inmadura o mimada, me ha dicho que aunque no pueda detener a mis hermanos todas las noches debo liberar dentro de mi misma la vida. Para qué ellos sigan viviendo, aunque me mate lentamente.
Mis tutora le dice a todo mundo que tengo 14 años, que pronto entrare a preparatoria y que necesito un padrino que me pague los estudios ya que soy "huérfana". Ella quiere que yo siga estudiando, dicen que soy muy buena para todas la materias, especialmente en matemáticas, ciencias, geografía, y claro que en español, además de que pertenezco al coro y reparto de un grupo teatral, en lo único en lo que no me puedo aplicar en civismo; se me hace difícil entender la ética hipócrita de los humanos.
Al parecer al terminar la secundaria en el orfanato, mis padrinos me mandarán a la preparatoria ahora por fin podré salir a conocer las calles con más frecuencia, ya no estaré rodeada de toda clase de mujeres, por fin podré tener más contacto con los demás humanos.
Espero con ansias poder terminar de estudiar pronto.