El Caos de Ariadna © (editando)

Capítulo 7. Un día para recordar (editado)

—POV Narrador Secreto—

Finalmente estamos en Miami. Ya todos estamos con las maletas en mano, esperando encontrar a los chicos.

No tardamos mucho tiempo en encontrarlos. Creo que ese cartel que sostiene Matt en alto, en donde dice: PEDASOS DE IDIOTAS Y PRINCESA" es más que suficiente.

Nos dirigimos hacia ellos. Derek, Matt y Will nos esperan con grandes sonrisas en sus labios. Bueno, sonrisas divertidas.

Nos detenemos enfrente de ellos, y sin perder tiempo nos saludamos con un abrazo.

— ¡Princesa! —exclama Matt, dirigiéndose a Cami con los brazos abiertos.

— ¡Matty! —responde ella, con entusiasmo. Los dos se envuelven en un gran abrazo, como siempre lo hacen cuando se ven.

Los chicos comienzan a molestarse y a despeinarse.

— Nos extrañaron, ¿verdad? —pregunta Derek, mientras se separa de mi abrazo.

— Vieras cuanto —respondo sarcástico.

— ¿Qué tal el viaje? —pregunta Matt, separándose de Cami y acercándose a mí.

— Pues bien —es Liam quien responde. —todo el viaje estuvimos durmiendo, así que no hay queda —se encoge de hombros.

— Solo pusieron sus culos en los asientos y ya estaban dormidos como unas marmotas —dice Cami, abrazada a Lucas. —creo que todos los pasajeros no pudieron dormir por sus ronquidos.

— Eres una exagerada —protesta Chris, acercándose a ella. Él estira su mano para tratar de despeinarla y Lucas lo evita.

— ¿Por qué tienes que andar protegiéndola pues? —Chris pregunta en cierto tono molestón. —ni que fueras su caballero de brillante armadura.

— ¿Y qué? —replica Lucas, mientras pone su mano sobre la cabeza de Cami. —lo que pasa es que solo yo la puedo molestar —y sin que lo espere, le desarregla el cabello.

— ¡Lucas! —chilla ella, mientras se separa de su abrazo y lo señala acusadoramente.

— ¿Qué? —se hace el inocente.

— ¿Qué? —lo remeda Cami, mientras se cruza de brazos. Camina sin deshacer sus brazos hasta colocarse junto a Matt. Desenvuelve sus brazos y lo abraza. —tú no me vas a molestar como ese feo, ¿verdad? —hace un mohín, levantando el rostro hacia Matt.

— No preciosa, yo no lo haré —le dice y le guiña un ojo. Luego le corresponde el abrazo y le planta un beso en la mejilla.

— Quita tus labios de mi hermana —advierto, mientras me cruzo de brazos y le doy una mala mirada.

— ¿Qué dijiste? No te escuche —dice, haciéndose el desentendido, mientras separa su rostro del de mi hermana. —pero, para que te vayas adaptando a tu futuro. Cami y yo vamos a terminar casados —agrega, con una sonrisa pícara. —¿verdad, preciosa? —baja la mirada hacia ella. Me fijo en que ella se está muriendo de risa.

— Por supuesto que sí —afirma con la cabeza. —pero eso ellos no lo saben —le guiña un ojo a Matt. —es nuestro secreto.

— Bueno, chicos ¿Qué estamos esperando para irnos? —escucho la voz de Lucas, interrumpiendo. —se nos va a hacer tarde, tenemos que aprovechar el día que nos resta.

— Tienes razón —concuerda Ethan.

— Entonces, andando —ordena Ryan.

Todos volvemos a sujetar nuestras maletas y comenzamos a caminar hacia la salida.