—POV Ari—
Siento una mano cerrarse sobre mi brazo y tirar de mí. Me estrello contra un firme pecho.
Subo mi vista y me encuentro con una mirada electrizante, que no se mira para nada contenta.
Paso mi mirada por sobre su hombro y observo a la chica con una cara de indignada.
Vuelvo a posar mis ojos sobre él, y me suelto de su agarre.
— ¿Y a ti que te pasa? —lo encaro, mientras me cruzo de brazos.
— ¿A mí? Nada, ¿por qué lo preguntas? —responde con una voz neutra, y con su ceño fruncido.
— Una simple pregunta —digo y me encojo de hombros, todavía con los brazos cruzados. —¿y qué haces aquí? Si se puede saber, claro —elevo una ceja, inquisitivamente.
— Solamente pasé a saludar —declara, mientras su rostro empieza a apaciguarse.
Busco con la mirada a Jared, y lo encuentro algo retirado de nosotros. Pero, puedo notar perfectamente su sonrisa divertida. Sé que está atento a la conversación.
— Ya pasaste a saludar —descruzo mis brazos. —así que, si me permites, voy a continuar bailando con Jared —paso por su lado, en dirección a Jared. Pero, una mano me vuelve a detener.
— ¿Y ahora qué? —volteo a verlo con aburrimiento.
— Tú no vas a bailar con él —ordena, con sus ojos nuevamente encendidos. Su mano me suelta, pero solo para poder encerrarme entre sus brazos.
— ¿Ah? ¿sino? —pregunto alzando una ceja, incrédula. —¿y quién me lo va a impedir? —mis manos se posan sobre su pecho y empiezo a arrastrarlas, hasta que terminan por detrás de su cuello, entrelazadas. —¿tú me lo vas a impedir? —agrego con reto, mientras acerco mi rostro al suyo.
— Sí —murmura sin separar su rostro del mío.
— ¿Y cómo lo vas a evitar? Si se puede saber —lo miro fijamente a los ojos. Él me sostiene la mirada.
— Así —susurra, mientras desvía sus ojos, para posarlos sobre mis labios.
<< ¡Mayday, Mayday! ¡Peligro!>>
Acorta la distancia entre nuestros rostros.
Por autoreflejo, cierro mis ojos como una tonta.
Soy una contradicción andante.
Debería de ganarme el premio a la más ilusa del mundo.
Siento sus labios contra mi mejilla.
<<Damas y caballeros, es así como te devuelven tu propio juego>> <<De nuevo>>
Silencio consciencia.
Abro los ojos, y me encuentro con una sonrisa juguetona sobre sus labios. Y sin poder evitarlo, tuerzo los ojos y me río de lo tonta que soy.
Tengo que aceptar que me la ha jugado bien.
Separo mi rostro un poco de él, y siento como su agarre se afloja de mi cintura.
— Bien jugado, Alexito —palmeo suavemente su mejilla. —pero, sabes que esto no se va a queda así ¿verdad? —
— Oh, ten por seguro que no se va a quedar así —responde, con diversión y reto. —luego lo resolvemos —agrega, mientras señala con su cabeza hacia los sillones.
Ya la mayoría de los chicos se encuentran allí.
— Vamos con ellos —comenta, soltándome. Se gira, para empezar a caminar.
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El Caos de Ariadna © (editando)
Romance¿Crees que las personas muestran su verdadera apariencia? Cuidado que nunca se sabe si detrás de una sonrisa amable y deslumbrante se encuentra la maldad más sólida del mundo. Hay que recordar que detrás de una historia hay diferentes perspectivas:...