Amigos Reales ¿Existen?
Claro que sí.
Solo tienes que saber diferenciar
Entre tus amigos "ocasionales" y
Incondicionales.
~Denise Torres~
—POV Ari—
Y, aquí estamos, aburridas, a la espera de los chicos. Eso que apenas ha pasado como treinta minutos desde que subimos a traer nuestras cosas.
Observo a Adi a mi lado, comiendo una manzana. Mi hermana se encuentra sentada en otro sillón, con el teléfono en mano. ¿Y yo? Bueno, yo estoy con mi cuaderno de dibujo haciendo unos bocetos.
Tengo que aprovechar mi tiempo en algo productivo, ¿no?
Las chicas están cada una en su mundo, mientras que yo, no puedo ser así de paciente. Cuando a mí me dicen una hora en específico, tienen que cumplir con eso.
y para mi desgracia, conozco tan bien a estos ineptos, que sé que van a tardar una eternidad.
No logro concentrarme de todo en mis dibujos, empiezo a mover mi pie insistentemente. Cierro mi cuaderno y lo dejo en la mesa auxiliar, agarro mi celular y llamo.
Miss paciencia me llaman.
Las chicas me siguen con la mirada y no pierdo la diversión reflejada en sus ojos.
Escucho el primer tono, continúa el segundo, y le sigue el tercero.
Siempre tardan una eternidad para responder.
Es hasta el quinto tono que responden la llamada.
— ¿Qué hay, guapa? —pregunta una voz grave, la cual distingo como la de Mike. Y eso que llame a Jared.
— Se puede saber a qué horas piensas aparecer —pregunto evidente impaciencia.
— Tranquila, ya vamos en camino —responde él, alzando más la voz.
De fondo, puedo escuchar el escándalo que tienen los chicos, llega a mi la voz de un desafinado Agus.
— No seas impaciente. Ya estamos cerca, gorda —se entromete otra voz masculina. Esta vez, es Jared quien habla.
Por supuesto, siempre nos ponen en altavoz.
— Ay aja, vieras como te voy a creer —respondo sarcástica.
— Será mejor que empiecen a salir al jardín, en dos minutos llegamos —habla de nuevo Mike.
— Bueno —acepto. —pero, si no están aquí en dos minutos, ya van a ver —amenazo como la gran amiga que soy.
La mejor.
— Vale, nos vemos —se despide Jared y finalizan la llamada.
Me alejo el celular del oído, y me topo con la mirada de las chicas.
— ¿Qué te dijeron? —pregunta Adi, mientras se levanta del sillón y comienza a dirigirse hacia la cocina.
— Que salgamos al jardín, que en dos minutos están aquí.
Las tres salimos de la casa, y nos sentamos en la acera, a esperarlos.
Todavía no sé cómo es que terminamos con esos bobos. Nunca hubiera esperado una amistad con ellos.
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El Caos de Ariadna © (editando)
Romansa¿Crees que las personas muestran su verdadera apariencia? Cuidado que nunca se sabe si detrás de una sonrisa amable y deslumbrante se encuentra la maldad más sólida del mundo. Hay que recordar que detrás de una historia hay diferentes perspectivas:...