—POV Ari—
¿Hoy? El mejor día de mi vida ¡Yeiiii!
Hoy es mi primer día de Universidad, y no hallo el momento de llegar.
¡Por favor! ¿Quién va a estar emocionado el primer día de universidad?
Ha pasado exactamente semana y media, desde el pequeño incidente con Alex. No, no he hablado con él, más que simples "Hola" y "Adiós", y uno que otro asentimiento con la cabeza de su parte. Es lo único que hace.
Ahora con Cami, hemos aprovechado la semana y hemos salido al centro comercial, a comer, a comprar ropa, y muchas cosas más. Por supuesto, junto con mi hermana. Ella va a donde voy yo, y yo a donde ella va.
Escucho como suena mi segunda alarma, indicándome que ya es hora de levantarme.
Una sola alarma no me alcanza, siempre terminó apagándola y me vuelvo a dormir. Por eso tengo que programar como 3 o 4. Mínimo.
En fin, lo importante es que me levanto ¿No?
Me enderezo en la cama y me levanto. Un día menos para salir de la universidad.
Hay que ver el lado positivo. No sé si es positivo, pero buenoooo.
Me meto en la ducha para poder despertarme por completo. Si no me baño antes de salir, siento que no soy yo. O sea, se me nota la cara de sueño que cargo todo el día.
Salgo de la ducha y me dirijo hacia mi armario. Creo que voy a ir por lo seguro. Decido ponerme un conjunto que me encanta. Falda de cuadros (algo corta) decente. He visto cosas mucho más cortas; además, llevo una licra debajo.
En la parte de arriba, llevo una camiseta negra de tirantes finos, que se adhiere a mi figura, y encima de ésta, una chaqueta de cuero negra.
Toda una chica mala. Amo.
Y para completar el outfit, me coloco unas calcetas negras altas, que llegan un poco más arriba de las rodillas, que logran fundirse con mis botines negros de tacón corrido.
Me deshago las trenzas que me hice anoche. Siempre me gusta hacerme las ondas al natural.
Me observo en el espejo ovalado de cuerpo completo, y doy una vuelta, observándome de los pies a la cabeza.
Perfecto. Lista para el día.
¿Por qué no esmerarme el primer día en mi atuendo? Rapidamente vuelvo a entrar en el baño, para aplicarme un poco de rímel en las pestañas, me hago un sutil delineado, y me hecho un poco de brillo labial.
Hoy sí, lista.
Y así, es como ya estoy lista para mi primer gran día.
— La más guapa —me alago yo sola, y salgo del baño.
Agarro mi mochila de sobre el escritorio y salgo de mi habitación. Bajo las escaleras y me dirijo hacia la cocina.
Papá se encuentra sentado ya en la mesa, con una taza de café en mano, y con la otra sosteniendo el periódico. Stacy se encuentra también sentada, justo al lado de él; y mamá, está junto a la estufa, con una espátula en la mano.
Mi apetito se desvanece mágicamente.
Me acerco a la encimera y agarro una manzana del frutero. No tardo ni un segundo y le doy la primera mordida.
— ¿Nos vamos? —pregunto con la boca llena y observo hacia mi hermana.
Lo sé, necesito clases de modales.
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El Caos de Ariadna © (editando)
Romance¿Crees que las personas muestran su verdadera apariencia? Cuidado que nunca se sabe si detrás de una sonrisa amable y deslumbrante se encuentra la maldad más sólida del mundo. Hay que recordar que detrás de una historia hay diferentes perspectivas:...