Parte de mi

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⚠️Tema sensible. ¿Turbio?



Tony fue un padre soltero que inesperadamente encontró el amor en un buen hombre de aspecto surrealista, caballeroso, rubio, ojos azules, sonrisa perfecta y cuerpo fantásticamente trabajado. Todo fue tan espontáneo y maravilloso, a este hombre no le importó que el castaño unos centímetros más bajo que él tuviera un hijo. Al contrario, amó al pequeño como propio, de su, sangre. Le hacía regalos a ambos, los invitaba a salir, conocerse en el parque una tarde gris fue lo mejor que les pudo haber pasado...

O eso pensó el bonito hombre de joven edad que creía estar en un cuento que duraría para siempre. Para el rubio Tony era su tipo, no podía dejar de detallarlo, cada que tenía la oportunidad lo tocaba para sentir la cremosidad de su piel, la textura de su cuerpo, la proporción... exquisito. Malditamente delicioso. Definitivamente es su tipo. Meses después Tony lamentaría haber conocido ese tipo porque, gracias a él, todo acabo, su mundo se vino abajo de la peor manera. ¿No lo creen?

Ir a ciegas le pareció fantástico, Steve, que es el nombre de este hombre, lo invito a su casa, ¡Por primera vez en meses de relación! Y oh Dios estaba tan emocionado, dejaron a su niño con una amiga para tener unas horas a solas. El de ojos zafiro lo cuido, mimo y alimento con delicias que él mismo preparo, tenían un sabor particular que le hacía gemir en gusto. El Vino que tomaron, ¡Por favor! Es el mejor que sus papilas gustativas han probado. Compartieron besos y más caricias hasta que el calor se intensificó en ambos, se sentía borracho por la fiebre y el alcohol. Maldita sea la ropa estorbaba. El más fuerte lo dirigió por un pasillo dándole empujones amistosos, le sonreía con picardía y sadismo. ¿De este Steve se enamoró? Le encanta, lo adora, pero quizá... fue demasiado, porque demonios, nunca se termina de conocer a una persona.

Su vista se volvía borrosa a medida que avanzaba, la madera rechina bajo su peso, tiene que sostenerse de las paredes para continuar hasta la puerta del fondo de madera oscura que los espera. Gira dudoso hacia el contrario, que lo miro confundido.

“¿Esta es tu habitación?” Había preguntado señalándola con su dedo índice. Este asintió como niño pequeño, “Así es. Vamos, no perdamos tiempo” insistió volviéndolo a empujar. El castaño sonrió completamente confiado, camino los pasos que le faltaban hasta poner su delicada mano en el picaporte plateado bien lustrado, giró provocando un chirrido. Juraba que podía sentir la ansiedad y anticipación del joven padre recorrerle, relamió sus labios deseoso cuando Tony abrió por completo la puerta. “¿Steve? Esto es un sótano”  arrugó la cara enrarecido, se asomó viendo la profundidad de la habitación oscura, solo podía ver el primer peldaño de las escaleras. “Estamos un poco tomados, supongo que nos confundimos” rió despreocupado, pero la mano que se posó sobre su hombro y la vocecita que hablo en su oreja le dio escalofríos, sintió el miedo recorrerle. “No, Tony. Bienvenido a mi cuarto especial, y perdoname, pero de verdad tengo hambre”

Con las manos en los bolsillos y desde arriba, contempló el cuerpo inconsciente de su ex novio yaciendo en el suelo después de haber rodado por las escaleras, y golpearse la cabeza con el último y afilado escalón. Empujarlo no fue la parte más emocionante. Podía ver perfectamente en la oscuridad, como un gato al acecho, aún así encendió la bombilla para apreciarlo mejor, un chorrito de sangre brotando de la pequeña abertura en el cráneo de Stark. Gimió emocionado, sentía su boca... salivar.



Su parte favorita siempre será quitarles la piel, picarlos en pedacitos con una motosierra, un cuchillo carnicero o más simple, un hacha. Le excitaba ver el espectáculo del líquido carmesí pintándolo todo a su paso, en especial sus manos, las cuales de vez en cuando lamía para quitarla. No le gustaba verlos agonizar, aunque es inevitable así estén inconscientes, el cuerpo involuntariamente reacciona moviéndose bruscamente o produciendo gruñidos guturales que le da terror. Le gusta ser organizado, separa los pedazos en tazas, lo que no le gusta como los órganos los vende o se los da a los animales, como las sobras que deja, siempre trata de que todo al final del teatro quede limpio. Sin un rastro de sangre, carne o cabello, sumamente impecable. Al igual que su cuerpo, se lava muy bien y quema la ropa que ya no le sirve, porque está manchada. No les da oportunidad de volver a despertar después de dejarlos caer, no es de las personas que aman los juegos previos.

Con todo listo empieza la preparación, su parte favorita siempre serán los muslos, verán, son suaves, regordetes y ahí está la mayoría de la carne después de los glúteos o la panza. Estofado, frito, hervido, al horno, ¡Cómo sea! Cómo te lo imagines... le gusta comérselo de cualquier manera posible. Lo que sobra lo pone a refrigerar, después de todo sabe que le volverá a dar hambre.

—Ahora estamos juntos para siempre. Cómo tanto querías.

Canturreó alegre, acariciando los mechones marrones que tanto adoraba enredar sus dedos. Con el pulgar delineó las facciones de Tony, su última reacción fue una mueca de dolor cuando le corto la cabeza. Pudo ver en primera plana como sus ojos se apagaban hasta quedar sin vida. Cerro sus hermosos ojos avellana, y cosió su boca para que no pudiera susurrarle por las noches. Lo guardara en un frasco especial que él mismo decoró.

—Lo amarás—beso su frente mientras lo sostenía entre sus manos.—Pero, no estamos del todo unidos. Aún falta Peter para que nos haga compañía—rió dulcemente.—¿Sabrá tan bien como tú?

Contar la historia de cuando conoció a esa pequeña familia de dos y la acabo, siempre será agotadora. Aún más cuando todos los días ve carteles de “Se busca” pegados en todas partes con sus caras.

•••

¡Steve caníbal! 😬🤐. No diré nada, solo vi curiosidades de los héroes en cómics y vino a mi la inspiración. Nada más dejó claro que es canon jaja.

Solo Stony Donde viven las historias. Descúbrelo ahora