Alzo mi muñeca para cubrir con el dorso de mi mano los jadeos que emite mi garganta. Estoy encima del sofá, y no paro de mirar la puerta, como si alguien pudiera irrumpir en cualquier instante. Siento sus dedos resbalar dentro de mí mientras que con suavidad frota mi punto, gimo ante la placentera sensación.
—No tengo mucho tiempo. —Siento el mordiscó en mi nalga—. Entra en mí, deprisa... —suelto un gemido cuando empieza a embestirme con sus dedos.
—Controla tu boca —me regaña—. Tu voz es tan encantadora que me podría venir con solo escucharte.
Me retuerzo maravillado por el placer.
—Entra en mí —ruego otra vez—. Talek, cógeme ya.
Su mano aprieta con suavidad mi pene y luego empieza a masturbarlo.
No sería tan malo venirme de ese modo. Pero he pasado toda una semana sin hacerlo y no tendremos este tiempo hasta el otro lunes, así que no quiero irme complacido con un orgasmo de aquella manera.
—¿Cuánto quieres que te folle? —dice, y continúa frotando en mi interior—. Habla, Zov.
—Demasiado... —Sus dedos van más rápido—. Cógeme ya, necesito soportar esta semana.
Él se ríe y termina por abrirse el pantalón.
—¿Soy tu especie de medicina? —se burla—. ¿Algo así como antidepresivos?
—Eres mi profesor y te pagan por enseñarme. —Miro con deseo como bombea su dura verga—. Y quiero que me enseñes como puedes cogerme. —Abro más mis piernas para tentarlo.
—Nunca te animarás a probarla, ¿verdad?
—Tenemos un acuerdo. —Le hago memoria—. No te doy mamadas, es antihigiénico.
—El sexo también lo es. —Se agacha y resbala sus manos por mi torso, luego me besa en medio de las costillas—. Cuando la pruebes no te sabrá antihigiénico.
—Diablos, cállate. —Le pongo una mano en la boca—. ¿Vas a metérmela o debo conseguir otro profesor?
Siento como su punta hinca mi entrada y luego me toma de manera completa, hundiéndose y haciéndome gemir. Cierro los ojos, satisfecho de sentirme lleno.
—Si quisieras otro profesor ya te hubieras deshecho de mí. —Empieza a menearse más rápido—. Pero no puedes remplazarme. —Sus labios van a mi cuello, siento su lengua mojada y caliente—. No es tan sencillo.
No digo nada.
No porque no quisiera contrariarlo, simplemente, porque sería una pérdida de tiempo. Y ese corto lapso quiero disfrutarlo mientras siento su pene dentro de mí.
Aferro mis piernas a su alrededor y él continúa entrando y saliendo de mí. Toma mi falo y vuelve a masturbarme al ritmo en que me folla.
Llevamos alrededor de dos años acostándonos, desde que cumplí diecisiete para ser exactos. Yo le gustaba, pero no me tomaba importancia porque era un niño, y además soy el hijo del rey.
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El cisne y el príncipe
Romance(Novela: Boys Love) +21 COMPLETA Entre acuerdos y alianzas, los herederos de Ledya y Teorvek se ven arrastrados hacia un deber trascendental. El primer encuentro en familia insinúa una relación llevadera, pero las apariencias pueden ser engañosas...