Diario de un adolescente enamorado

•19•

13 años
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" -Lo más interesante de ésta actividad es que podrán apreciar a las serpientes en su hábitat 'natural'.

Nuestra primera expedición en el museo natural del instituto. Ya que los niños eran conocidos por tocar todo lo que veían, nuestro instituto colocó la regla de salir, niños menores de 13 no tendrían salidas a lugares importantes por ese riesgo.

Todos pensaban que era tonto, pero nuestros padres debían acatar si no querían pagar miles de dólares por un objeto roto.

-Nuestro guía, Yakotsu, los estará acompañando y aclarando las dudas el día de hoy.

Detrás de la directora Kaede apareció una chica con rasgos raros, pero el nombre era familiar.

-Ese chico, ¿no es tu hermano?

-¿Lo reconociste ?

-Dijiste que tu hermano era un poco extraño por su forma de vestir y ni hablar del nombre.

-Sabía que lo descubrirías.

-¡Muy bien! Empezaremos por el principio, las serpientes son un suborden de saurópsidos diápsidos pertenecientes al orden Squamata, lo que quiere decir que son reptiles que se arrastran. Alguien podría decirme ¿cuántos huesos tiene una serpiente?

Era una pregunta demasiado sencilla, se encontraba en la primera parte de nuestro libro de biología de segundo año. Levanté el brazo, demostrar que soy el primer en saberlo.

-Las víboras tienen 200 y las pitones... 400.

-Excelente - la sonrisa que mostró fue demasiado extraña para mí - continuaremos en la sección venenosa, vengan detrás de mí.

Mientras los demás avanzaban escuché a Bankotsu y Kohaku reírse, entendía el porqué.

-Se te salió tu gallito.

Fue el detonante para que sus carcajadas salieran a flote, sus risas eran peor que las de mujeres del mercado.

-Es normal.

Se rieron de nuevo, odiaba esto, en estos días mi voz estaba sufriendo de un cambio, como lo decía mi padre. Solo que tenía que salir con un acento medio raro, que causa risa a todos los que lo escucharon.

-Vámonos.

Sin esperar respuesta fui en donde los demás siguieron, muy en el fondo se sentía dolido, que todos se burlaban de su voz.

-Vamos Sessho, no te enojes.

-No me enojé.

-Claro.

De cerca, las serpientes eran demasiado increíbles, sus colores y la pequeña cantidad del veneno que necesitaban para tener el control total de su víctima.

-El color de ésta serpiente es hermosa.

Y tenía razón, una de marrón oscuro o rojizo, fácilmente podría ser considerada por el suelo o una hoja.

En la parte inferior podía leer su nombre.

-La serpiente taipán (Oxyuranus microlepidotus) es una especie de serpiente de la familia Elapidae nativa de Australia y la serpiente terrestre más venenosa del mundo.

Era interesante, ¿si una persona tuviera ese poder en las manos? Una persona con uñas con veneno o el veneno corriendo por sus venas, sería la persona más temida e iría por el camino de la supremacía.