ENTRE AMIGOS

El regreso

¡Hola gente, estamos de regreso! Muchas gracias por la espera.

Ya todo bien y muchas gracias por sus comentarios, no saben como amo leerlos ♥

Espero poder actualizar cada semana o al menos un poco más seguido, tomen sus pañuelos por favor. ADVERTENCIA de contenido sensible. 🤧🤧

PD: No se olviden de dejar su voto y sus comentarios.

Disfruta la lectura.

Las cosas simplemente no podrían ir peor. Tomo muchas fuerzas y levanto el teléfono para comunicarme con mi padre, después de una larga platica me invita a ir a su casa a pasar unos días o el tiempo necesario para sanar mis heridas, pero, aunque quisiera hacerlo, tengo muchas cosas por resolver.

— No olvides que te amo. – dice.

— Yo también te amo pa. – respondo.

— Cualquier cosa, llámame.

— Lo haré.

Termina nuestra llamada y mi vida se va en suspiros, apenas puedo creer toda la mierda que ha estado pasando, por alguna razón me sorprende que mi padre no se haya enterado ya por Derek, aunque supongo que dejo ese trabajo para mí.

Siento extraños mareos y no puedo aguantar los dolores, esos terribles dolores que me hacen retorcer del dolor, llamo a un taxi y voy camino al hospital, siento mi boca seca y mi cuerpo débil, el taxista me mira una y otra vez por el retrovisor y trato de tranquilizarlo para que llegue lo más pronto al hospital.

— ¿Señorita va usted bien?

— Si, si, avance. – comento, comienzo a parpadear lentamente, estoy perdiendo el conocimiento.

El taxista pisa más fuerte el pedal, apenas puedo mantener los ojos abiertos cuando llegamos al hospital, muy amablemente me ayuda a llegar a la entrada y lo veo esperar.

— ¿Sabe su nombre? – pregunta una enfermera.

— Amber.

— ¿Apellido?

— Jinks.

— Llévenla a urgencias. – ordena y en el trayecto a urgencias me quedo dormida.

El sonido de las maquinas midiendo mi pulso y presión me despiertan.

¿Qué estoy haciendo aquí?

Une enfermera me observa detrás del cristal, hace unas anotaciones y vuelve a aparecer con una Doctora.

— Buenas noches señorita Jinks, soy la doctora Taylor Gallagher ¿Cómo se siente? – pregunta.

— Tengo sed. – susurro.

— Es normal, Olivia, por favor. – ordena y la enfermera sirve un vaso de agua para mí. – ¿Hay un familiar con quien podamos comunicarnos? – pregunta y niego. – ¿No tiene familia?

— Sí, pero... no quiero que estén aquí. – contesto.

— Lo siento señorita, pero alguien tiene que hacerse cargo de usted.

— ¿Qué es lo que tengo? – pregunto.

— Se le realizaron un par de tomografías en la que pudimos percatarnos que se le realizo una histerectomía ¿Cuáles fueron las razones? – pregunta y es como si mi vida diera una vuelta de 180°

— ¿Volvió? – pregunto, la doctora presiona sus labios dibujando una línea delgada.

— Aún estamos haciendo los estudios, vamos a hacer una biopsia y pronto le daremos los resultados.