Café amargo

397 57 5
                                    


Enlazo mis manos una y otra vez, trueno mis dedos y miro a todas direcciones, el reloj avanza lentamente mientras mis ansias incrementan. En cada sonido de la campana volteo a ver a la entrada, pero no aparece por ningún lado. Le doy vueltas infinitas a mi taza de café mientras continúo esperando minuto a minuto.

Han pasado diez minutos y no hay señal de él, miro el celular tratando de distraer mi mente, veo a través de los ventanales, pero no pasa nada.

— No va a venir. – digo como si alguien platicara conmigo.

Miro la taza con mi café frío, ni siquiera he podido darle un sorbo, cuando me animo a hacerlo y pruebo ese sabor extremadamente amargo que podría provocarme una gastritis terrible, entonces recuerdo que nunca lo preparé y siento que quiero escupirlo, pero lo trago y hago una mueca por mi café amargo. Salgo del lugar dejando ahí mi café, supongo que ya no importa.

Derek

¿Qué clase de broma es esta? ¿Es acaso que Amber se está burlando de mí?

Todos estos días he pensado en venir o no, he deshojado más de 15 rosas para que saliera un sí y al llegar veo a Joseph, nos miramos por un segundo y finalmente acelero para perderme en medio del tráfico, miro por el espejo que me observa mientras me alejo del lugar, pero no sé nada más.

¿Es esto lo que querías Amber?

Me siento como un imbécil, además de molesto y por alguna razón dolido, una razón que sé perfectamente es porque aún la amo.

— Señor, tiene una visita en su oficina...

— Hola Derek. – dice Angelique.

Joseph

Mierda...

La veo por la ventana, está sentada y dando vueltas a la taza que tiene entre sus manos. ¿Habrá hablado con Derek? Me gusta contemplarla, aunque ella no lo sepa, en un millón de oportunidades no creí que coincidiría con ella en un café, la veo mientras observa su reloj, parece desesperada y desanimada, quizá no sea tiempo para acercarme, es mejor darle tiempo al tiempo.

Amber

Al subirme al auto pienso en dos opciones:

1. Ir a verlo a su oficina, quizá no recordó que hoy quedamos para poder platicar.

2. Llamar y saber si paso algo.

Aunque quizá... no quiso presentarse y solo estoy alimentando mi esperanza, dudo por mucho tiempo en cual de mis dos opciones es la mejor para llevar acabo, llamar o ir a verlo, pero no lo sé.

Enciendo entonces la radio y escucho música. ABBA canta The winner takes it all mientras conduzco a su oficina, el trafico está más pesado de lo normal, me meto entre algunas calles para avanzar un poco más rápido, al parecer es la hora de ABBA, escucho Fernando, chiquitita, take a chance on me, Dancing Queen, Gimme! gimme! gimme! Entre otras canciones.

Me estaciono casi enfrente del edificio en dónde están las oficinas de Derek, hay dos carros más delante de mí, pongo el freno de mano y al levantar la vista mi corazón se rompe en mil pedazos, no sé qué hacer, solo puedo sentir como mis latidos se aceleran, mi respiración se entrecorta y mis manos tiemblan.

Angelique lo toma del brazo mientras salen del edificio, ambos sonríen por alguna razón y ella libera una risa escandalosa, me quedo viéndolos por un momento, sé que no pueden verme. Mis ojos se llenan de lágrimas y ruedan por mis mejillas. Quito el freno de mano y salgo de ahí, ahora sé porque no asistió a nuestra cita.

ENTRE AMIGOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora