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Habían pasado Once largos años. El pequeño Omega era todo un joven sumamente hermoso codiciado por todos los alfas y odiado por algunos omegas.


Eso era algo que a él no le interesaba en lo absoluto él estaba más concentrado en su deber.

El no era el típico Omega de débil, podría tener un cuerpo pequeño esbelto y delicado pero su fuerza y Valentía era algo que lo caracterizaba.

Su única desventaja era que cada vez que el tenia visiones se debilitaba mentalmente. Ya que su cerebro trabaja el doble de lo normal.

Recreando imágenes de sucesos que pueden ocurrir aunque no siempre eran acertados.

Podían variar, pero siempre se ponía ala defensiva. Y el día de hoy no era la excepción.

Antes de que su mejor amigo llegara a ayudarle a vestirse para la pequeña ceremonia.

Tuvo una..

Muy confusa...

Lo tenía nervioso y ansioso..

Esa voz.... Se repetia una y otra vez en su mente.


Vayan tras él!! - escucho aquella voz gruesa -no lo pierdan o los mato - demandó esa voz que nunca había escuchado le daba miedo pero por alguna razón a su lobo le gustaba todo era oscuro habían árboles por doquier en ese instante no sabía por dónde iba Solo que había pasado el límite de sus tierras.

Su traje blanco estaba sucio lleno de tierra y sangre....

Sangre que no sabia de donde provenía.


El sonido de unos golpes en la puerta lo sacó de sus pensamientos, no había dormido bien pensando en esa voz..

- pase - dijo acomodándose en el pequeño banco

- JiMin - sonrió el Omega de piel canela cabello azul.

- Tae - estiró sus manos necesitaba un abrazo, el único que lo reconfortaba era su amigo y su aroma.

- Que tiene mi mochi. - no dudo en acercarse a su menor el tenia el poder de leer la mente de las personas de su especie un don que el omega peli-rosa no tenia conocimiento. - no dormiste bien - pregunto una vez teniendo al peli-rosa acurrucado en su pecho.

- No - su voz salió amortiguada en el pecho del Omega que lo tenía abrazado.

- paso otra vez cierto -

- si~ -  sollozo odiaba tener visiones cada que las tenia pasaban cosas horribles.

Como la vez que vio en su visión a su padre morir.

El peligro los acechaba constantemente y él era el único que podía presentir pero aún era pequeño para poder dominar su gran Don.

Creyó que era nada mas una pesadilla.

En realidad lo fue y una muy real.

Su padre murió al seguir a un grupo de vándalos que habían osado en secuestrar a un omega de su manada.

Jamás supieron cual era el fin de esa persona en secuestrar al pequeño Omega que al igual que su hijo tenía cabellera Rosada.

❇ Omega Rubí ❇ 🐺 ❇ Yoonmin ❇Donde viven las historias. Descúbrelo ahora