Capítulo 28

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Todos los ángeles se fueron siguiendo a Travis, nadie se quedó para buscar problemas, papá Travis estaba irreconocible cuando lo subieron a la camioneta para llevárselo

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Todos los ángeles se fueron siguiendo a Travis, nadie se quedó para buscar problemas, papá Travis estaba irreconocible cuando lo subieron a la camioneta para llevárselo.

Los Diablos no entendían qué joder estaba pasando, no fue necesario pelear esta vez, eso aumentaba la frustración de todo, nos mintieron en la cara, a cada uno de nosotros, y esa traición es más dolorosa que cualquier otra cosa.

- Lucia.

Mamá llegó a mi lado, deteniendo mi actuar.

No me di cuenta que he estado golpeando la acera con el bate repetidas veces hasta que este comenzó a astillarse, estaba tan furiosa, tan avergonzada de mí ¿Cómo me dejé engañar de esta manera?

- Lucia ya basta, hija, basta.

Intentando frenarme.

Estaba demasiado enojada como para parar, necesitaba golpear algo más, necesitaba... necesitaba romperlo todo.

- Lucia, está bien, está bien - papá me abrazó con fuerza, impidiendo que pudiera seguir golpeando el piso- Se acabó, él no regresará ¿Lo entiendes no? Él lo hizo para protegerte, me costó entenderlo, pero vi su rostro abatido cuando dijo todo eso viéndote a la cara. Él no va a volver, se fue por ti, por ti y la niña.

Que me lo dijera directamente era mucho más doloroso.

Travis... me engañó, el plan siempre fue dejarme, destruir y pisotear mi corazón para que lo odiara, así sería más fácil marcharse sin mirar atrás.

- ¿Por qué papá? - perdiendo fuerzas para luchar, él era demasiado fuerte- ¿por qué me pasan estas cosas a mí?

Cayendo en la desesperación.

- Eres joven Lucia, sé que duele ahora, pero habrá mucho más amor en tu vida, Travis no será el único, habrá muchos más, eres una chica preciosa, con un montón de talentos, divertida, espontanea... joder... cualquier persona querría tener de novia a una chica como tú, sólo...

- No más boxeadores - dije- No volveré a meterme con ninguno de ellos, son todos unos mentirosos hijos de puta - soltando con odio- Tenías razón... no debí involucrarme con boxeadores - llorando- ¿Por qué no te hice caso? Soy una tonta...

Me soltó lentamente, me volteó y abrazó con fuerza, acariciando mi cabello.

- Mi niña... mi princesa... - Mamá se nos unió- Tranquila, va a pasar, este dolor pasará, no hay mal que dure mil años, olvidarás a Travis y conocerás otra persona que...

Bajando el volumen de su voz, sin terminar la frase.

- ¿Qué cosa, papá?

Presionando.

Quería saber.

- Otra persona que podrá amarte sin todo un legado de odio sobre sus hombros, Travis tenía muchas cosas de las que encargarse, él no puede librarse de todo eso, la sangre pesa.

Deja que ocurra #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora