The Heirs - Royalty | Choi Young Do

C A P Í T U L O - 34

Narra Young-Do

Luego de que la luz se fuera y todo quedará en silencio, apareció un vídeo, un vídeo que no sabía que existía, era sobre mí.

Mierda esto no puede estar pasando.

-Young-Do. –la voz de Amber me sacó de mis pensamientos. - ¿Sabes qué es esto? ¿Por qué estás ahí?

-Amber, creo que debemos irnos. –mencioné mientras sujetaba su mano. –Por favor. –supliqué.

Pero no vi que quisiera acceder, ella se zafó de mi agarré, cosa que me dio miedo, ella no debía saber, me acerqué al reproductor para ver si podía desconectarlo, pero no encontraba donde se estaba proyectando.

-Vamos, acepta.

- ¿De verdad crees que no puedo lograrlo?

-Vamos Young-Do, te daré todo lo que quieras

-Ya tengo todo lo que quiero, ¿Que podrías darme tú?

-Venganza. Solo debes ganar la apuesta.

Sabía lo que venía a continuación, y como no encontré donde parar el video, me acerqué a Amber, bloqueando su visión con la pantalla, ella se me quedó viendo, iba a mencionar algo, pero su voz se quedó a medias ya que de nuevo el vídeo sonó.

-Solo haz que Amber se enamore de ti.

Todo el lugar estaba en silencio, y yo no podía dejar de ver a Amber, como sus ojos se empezaban a llenar de lágrimas que yo estaba causando, por estúpido.

-Acepto. –Amber cerró sus ojos. –Te aseguro que ganaré, yo nunca pierdo.

Me dolía verla así, cuando abrió sus ojos las lágrimas cayeron por su rostro y las mías también, no la podía perder.

Ella me apartó de su lado, pero sostuve su mano para evitar que se fuera.

-Amber, puedo explicarlo. –hablé.

Ella solo se soltó de nuevo y salió. Bona llamó el nombre de Amber, yo la seguí, tenía que hablarle.

Cuando me acerqué solo escuché a lo lejos la voz de esa arpía que mencionaba que nadie la iba a querer, agarré el brazo de Amber pero ella me empujó y salió, sin embargo, me detuve un rato.

-Si llegó a descubrir que tú tienes algo que ver en esto, juro que te matare. –le hablé seriamente a Ye Sol. Ella solo se quedó asustada. Luego de mencionar eso, salí, pero Amber ya estaba en el elevador.

-Mierda. –suspiré.

¿Cómo pudo ocurrir esto? ¿Cómo dejé que esto pasara?

El elevador regresó así que no dude en subir y marcar rápidamente la planta baja. Por fin se detuvo así que salí y empecé a caminar, pero de repente sentí una mano en mi pecho.

-Amber –exclamé, estaba cerca de ella. Pero atravesó la puerta.

-Detente –sentí una mano en mi pecho, volteé a ver enojado a Hyo Shin culpable de no poder alcanzar rápidamente a Amber.

-Quítate, no es de tu incumbencia –hablé enojado.

-No dejaré que le hagas más daño de lo que le hiciste. Aunque no sepa exactamente qué es, la voy a cuidar, ella me gusta y no quiero que sufra por imbéciles como tú.

Lo que dijo solo me enojó más así que me importó una mierda y lo empujé, sorprendiéndolo, cosa que él para detenerme me dio un puñetazo en el rostro.

No estaba para juegos absurdos así que lo agarre del brazo y le di una vuelta dejándolo en el suelo como los entrenamientos que hemos tenido con mi padre.

Luego de ver cómo se quejaba salí sin importar que llamara mi nombre y corrí para buscar a Amber.

No la podía perder, debía explicarle, tenía que decirle que no solo la quería, sino que la amaba y que conocerla fue lo mejor a esta miserable vida.

Corrí un poco más y solo alcancé a ver como un bus seguía su camino por la carretera, y dentro, logré ver a Amber.

Pero era en vano, ella ya se había alejado de mí, la había perdido y yo tenía la culpa de eso.

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Capítulo corto, pero regresé. 

Ahora pero una pequeña versión sobre como se sintió Young-Do. 

Estaré trabajando en el siguiente capítulo, ahora si, sobre que pasara y como se tendrá que afrontar este problema.

¡Gracias por leer! ❤️