No sé, pero te amo.-Novela.

Capítulo 24.

Eran las cuatro de la madrugada cuando yo me desperté y Liam no estaba a mi lado. Salí de la cama y me levanté de ella. Me acerqué a la puerta y la abrí. Al llegar a las escaleras vi que en el salón alguien estaba viendo la televisión.
Baje las escaleras y me acerqué al sofá. Vi que Liam dormía plácidamente en él. No quería despertarle así que apague la tele y tragando mi orgullo me tumbe al lado de él. Le observé por unos minutos, recorriendo sus fracciones de la cara con mi mirada. No me di cuenta que sonreía hasta que noté un ligero dolor en los dos costados de mis mejillas. 
Puedo huir de alguien a quien temo, puedo intentar luchar contra alguien a quien odio. Pero me quedo sin opciones cuando amo a mi potencial asesino.¿Acaso es posible huir o luchar si eso causa un grave daño a quien quiero?  Si yo soy lo único que puedo darle y de verdad le amo por encima de todo, ¿por que huir de él?
Y entonces pienso en eso de que si realmente estas enamorado de una persona harías cualquier cosa por ella. Harías cualquier cosa por estar siempre a su lado, aunque eso supondriera olvidar todo el pasado. Olvidar lo que alguna vez fue.

Desperté por los rayos del sol que entraban por las ventanas. Giré la cabeza y le miré. ¿Cuánto tiempo llevaba despierto, observandome?
Me miraba a los ojos, como si estuviera intentado averiguar qué es lo que hacia aquí después de la "discusión" que tuvimos. 
Le sonreí, dándole a entender de olvidará eso, que no importaba y que todo estaba bien. Aún sabiendo que yo no estaba bien, que hoy se iva y no volvería en ocho largos meses. 
Me rodeó con su brazo mi cintura, acercandome a él.
Yo no sabía si besarle, él aún no me había sonreído y estaba algo confusa en ese instante.
-¿De verdad quieres que me vaya?
-No. - Y sin darme cuenta había pronunciado ese "no" que no quería decir de mis labios. No quería que se marchará pero tampoco quería que se quedará aquí sólo por mi, perdiendo aquella oportunidad.
-¿Y por qué me dijiste ayer que sí?
-No quiero que te quedes por mi.
Se quedo pensativo.
-¿Me vas a esperar? ¿No te irás a ningún lado?
-Claro que no.
-¿Estarás bien?
-Si.-Susurre. Sabía que no lo estaría.
Me sonrió y se incorporó.
-Vamos a desayunar.
Le devolví la sonrisa y me levante con él.
Nos dirigimos a la cocina y vimos a  Zayn vestido y desayunando.
-¿Te vas ya?
-Si, mi avión sale en dos horas.
-Suerte tio.
-Igualmente.
Liam y Zayn se dieron las manos y yo fui a preparar el desayuno de Liam.
-¿Tu no vas a comer nada?
-No tengo hambre, solo quiero café.
-Bueno chicos, me voy ya, mi taxi espera a fuera.
Me acerqué a Zayn y le abracé. Liam y él se volvieron a chocar las manos pero esta vez incluyendo un abrazo.
Me hice el café mientras Liam acompañaba a Zayn a la puerta.
Le puse a Liam el cuenco de cereales en la mesa y me senté con mi café entre mis manos.
-¿A que hora te vas tu?- Pregunté a Liam cuando apareció por la puerta de la cocina.
-A las siete de la tarde.
Asenti y bebi de mi café.
Al acabar de desayunar ayude a la Liam a preparar las maletas y nos pasamos el resto del dia en la piscina.
A las seis Liam ya estaba listo y con las maletas en la entrada. Niall había venido hace apenas unos minutos.
A las seis y media llamaron a la puerta y fui a abrir.
-Hola.
-¿Qué haces aquí?
-Liam me ha dicho que me quede, te guste o no.
Suspire, y como no tenía ganas de discutir le dejé pasar.
Liam estaba en la habitación así que subí.
-¿Por qué se tiene que quedar Harry?
-No quiero que estes sola.
-Se cuidarme sola.
-Lo sé, pero prefiero que este él.
-Esta bien.
Bajamos las escaleras y el taxi llegó.
Acompañé a Liam a la puerta y mientras Niall metía las maletas en el maletero, yo me despedía de Liam.
-Te llamaré en cuanto llegue,¿vale? Y todos los dias, por la noche hablaremos por teléfono.
-Vale.-Suspire y me mordi el labio para no llorar.
-Te quiero.-Me beso.
-Y yo.
-Harry, cuidamela.
-Eso esta hecho. 
Liam sonrió y me miro.
Me besó por última vez y se subió al coche.
Me acerqué a la ventanilla y le volví a besar, dándole a entender que le echaría mucho de menos.
-Adiós, te amo.
-Adiós, yo más.-Susurre.
Y el taxi arrancó y desapareció por las calles.