All for the Game / Punto de vista de Andrew Minyard

18. Las decisiones de Andrew III

Durante la semana Aaron había estado más callado que de costumbre y Andrew había notado que, a veces, su gemelo se quedaba observando a Neil, no con su usual indiferencia sino con una atención genuina. No era que hablaran con frecuencia con Andrew, sino que de cierta forma era durante las sesiones de terapia que tenían con Bee, donde podían lanzarse comentarios crudos. Sin haberlo dicho con palabras, habían llegado al consenso que la terapia era un terreno con bandera blanca para ambos.

–¿...Y qué es lo que tú quieres Aaron?– dijo Bee minutos antes de terminar la sesión.

–Quiero que rompas la promesa que me hiciste–dijo Aaron mirando a Andrew.

–Dame una buena razón– Andrew escrutó sus ojos.

–Nuestro trato es acabar juntos la universidad sin amigos, sin novias, sin personas importantes en nuestra vida ¿de verdad piensas que soy estúpido como para creer que Josten no significa algo para ti? He visto cómo te mira.

–Yo sí creo que eres estúpido.

–Entonces termina lo que tengas con Neil, ya no le debes protección, yo acabaré todo lo que tenga con Katelyn. Sólo tú y yo. Hazlo o rompe tu promesa– respondió Aaron firmemente, se levantó y abandonó la sala.

Durante el resto del día y la noche Andrew no pudo más que pensar en lo que le había pedido Aaron, era su única familia, era su hermano, había sido la primera persona a la que había querido proteger. Soltarlo era demasiado. Pero la voz de Neil retumbaba en sus pensamientos "elígenos", "elígenos, "elígenos"...

***

Al día siguiente, Andrew esperó a Neil afuera de su clase, encontrarse siempre sería un sentimiento de confort, pero esta vez lo necesitaba para que lo acompañara a la biblioteca, confiaba en qué él sabría qué hacer en caso perdiera el control con... Katelyn.

Ella tembló y las lágrimas se asomaron de miedo cuando Andrew la abordó en el pasillo desolado de la biblioteca. Él le había agarrado fuertemente su barbilla para que toda su atención estuviera enfocada en lo que le diría a continuación.

–Las condiciones para tu sobrevivencia son simples: nunca confundas esto con la aceptación y nunca, nunca, me hables. Eres parte de la vida de él, pero nunca serás parte de la mía. Si olvidas esto, te lo recordaré, y no sobrevivirás a la lección ¿entiendes?– cada palabra de Andrew era dolorosa.

Katelyn asintió llorando en señal de comprensión y Andrew la soltó, se limpió los dedos en su pantalón con una mueca por la sensación de haber tocado su piel.

–Espero que ustedes dos sean miserables juntos– fueron sus últimas palabras antes de salir de la biblioteca con Neil tras de él.

Neil parecía muy confundido por lo que acababa de pasar, pero Andrew sólo quería un momento para terminar de absorber lo que acababa de hacer, estaba rompiendo la promesa de su hermano, su único hermano.

–¿Qué cambió tu mente?– le preguntó Neil cuando lo alcanzó en el estanque del campus.

Y al no obtener una respuesta, insistió.

–Eso me recuerda... ¿Quién dijo "por favor" que te hizo odiar tanto la palabra?– le dijo Neil.

Para Andrew la pregunta de Neil era una cuchilla afilada en sus recuerdos.

–Yo lo hice– le respondió después de unos momentos. Al ver que Neil nunca lo entendería agregó: –Dijo que se detendría si yo lo decía.

–Y le creíste– dijo Neil