Capítulo 11
Un clavo saca otro clavo
Después de una semana encerrada en mi habitación sin saber del mundo, he decido que mi vida debe continuar. Dicen que nadie muere por amor, pero si bien en cierto, no se deja de existir, cierta parte de ti está muerta, y para ser sincera, yo me siento muerta, pues la Isabelle que todos conocen ya no está, en cambio, se quedó la peor versión, por lo que supongo ya es hora de resucitarla, si es que se puede, obvio.
Miro a mí al rededor y mi habitación esta desastrosa, y es ahora, precisamente, cuando necesito a Thelma, porque agoté toda mi energía al destruir mi cuarto. Es algo de lo que no me siendo orgullosa, es más, jamás creí reaccionar, por un hombre, ni por nada ni nadie, de esta forma tan macabra.
Cuando llegué aquella noche del terror a mi departamento, me tiré sobre cama a llorar desconsoladamente, creo que jamás había derramado tantas lágrimas, tenía una tristeza inmensa, con el corazón destrozado. Luego pasé a la fase de estar tirada con la mirada perdida y con una que otra lágrima resbalar por mis mejillas, hasta que llegué a la etapa de la ira, y empecé, como un demonio atrapado dentro de mí, a destrozar todo lo que estaba a mi alrededor. Abrí el armario, saqué toda mi ropa y con coraje la arroje al piso, tome el colchón de la cama y lo derribe, lo di vueltas con fuerzas que saque de mi rabia, reventé mis perfumes contra las paredes y el espejo de mi baño, haciendo que este se quebrara en mil pedazos al igual que mi corazón; luego tomé uno de esos trozos y quise acabar con el dolor que estaba sintiendo, pero como se dice, uno siempre tiene un angelito que está pendiente de ti aquí en la tierra, y mi angelito es mi amiga. Ella estuvo para detener todo lo destructivo que tenía en ese momento, me cobijó como la hermana que realmente es, me dejó llorar todo lo que quisiera y se lo agradecí enormemente, pensaba que llorando se limpiaría el sufrimiento que tenía en mi interior, y aunque creo que la tristeza no acabará, entiendo que es solo una etapa, la cual, con el tiempo, pasará y llegaré a recordar como una anécdota más en mi vida.Llego a la oficina y todos me reciben con mucho cariño, después de que he faltado por una semana a mis labores. Susan se encargó de avisar que estaba enferma para que no perdiera la oportunidad de trabajar con ellos. Me han encontrado delgada, y tienen razón, me he alimentado pésimo, por no decir que he comido solo para estar de pie.
Me pongo a trabajar como una loca para tener la mente ocupada, y la terapia sirve, muy poco para ser sincera, pero es mejor que tener la mente ocupada en un cien por cierto en como terminó mi aventura con Cristian.Al llegar al departamento, Susan me espera con la cena servida, y yo me limito a sonreír al ver la vajilla de porcelana que le han regalado sus padres el día en que se mudó aquí. Está vajilla, la usa solo en momentos especiales, por lo que supongo es un día importante, pues he vuelto a trabajar y a comer con "normalidad".
— Gracias, se ve todo delicioso —digo sentándome a la mesa, no sin antes haberme lavado las manos.
— Por cierto, llamó Beatriz a mi celular, le dije que el tuyo había caído al agua —comenta tapándome las espaldas, pues apagué mi celular el mismo día en que descubrí el engaño de Cristian—. Creo que deberías llamarla o vendrá personalmente a hablar contigo.
— De acuerdo —ruedo los ojos—, la llamaré después de la cena, aunque ya sé lo que quiere.
— ¿Qué harás con respecto a la boda?
— No tengo ni la más remota idea —digo pasando las manos por mi rostro una y otra vez—. No será fácil escapar toda la vida de esta situación, supongo que deberé empezar con los preparativos de la boda, si bien es cierto, ya no estoy con... Igual no me casaré.
— No entiendo.
— Dejaré que siga con los preparativos, sinceramente no me importa que gaste dinero en una boda falsa, lo que me importa, es que no me fastidie.
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CAMALEON (completa. + 18)
ChickLitIsabelle, te amo porque gracias a ti, puedo estar con diferentes mujeres en el cuerpo de una sola... puedo estar contigo, con Danya, Carolyn.... no me canso de amarte, me gusta ser tu loco controlador, autoritario, quien te lleve al paraíso... eres...