El misterio de nuestro pasado (ESPAÑOL)

Capítulo 13.

—   Escucha —Susurré llamando la atención de Nate— iré primero, vigila y si en quince minutos no regreso llama a Kyle y Jason y entra con ellos.

—   Nate asintió— Ten cuidado.

—   No nos pongamos sentimentales, nena —Susurré bromeando para luego entrar.

Caminé lentamente por el lugar, registré unas tres zonas distintas, el sitio parecía estar abandonado, ratas corrían por los suelos mojados mientras todo estaba a oscuras, cada paso que daba me desesperaba más por no encontrar el paradero de Destiny, si algo malo sucedía era mi responsabilidad.

De pronto escuché voces a lo lejos, una de ellas era femenina y estaba gritando una cantidad indescriptible de groserías e insultos, de pronto se escuchó un golpe y esta dejó de gritar, de inmediato supe que la habían golpeado a ella, fue entonces cuando lleno de ira aceleré el paso, me escondí tras uno de los muros y entonces los vi, habían 4 de ellos, 3 de espaldas y uno sosteniendo a Destiny, quien parecía agotada.

—   Parece que alguien no piensa venir a salvarte, lindura, ¿Qué haremos contigo? —Uno de ellos le hablaba en tono burlón, era el que la retenía.

Maldije en voz baja y enumeré mis opciones, la primera era arriesgarme a dispararle al que la retenía y darle a Destiny, la segunda era darle a alguno de los otros pero alertar al que la retenía y hacer que le hiciera daño, la tercera era simplemente entregarme, con la tercera la mayoría de los riesgos recaerían en mí así que la escogí.

—   Buenas noches, ¿alguien me buscaba? —Al dar un paso en frente con pistola en mano todos me apuntaron, menos el que retenía a Destiny, ese le apuntó a ella.

—   Miren quien apareció, parece que si eres todo un héroe después de todo, ¿Qué consigues a cambio? ¿sexo? —Me interrogó el más alto de ellos.

—   Cerré mis manos en dos puños y mi mandibula se tensó, intenté no caer en sus juegos pero que complicado era— A veces si, a veces no, todas las ventajas restantes lo valen.

—   Suelta el arma y acércate aquí —Ordenó.

Deje el arma en el suelo y me acerqué unos cinco pasos cuando me ordenó detenerme con un gesto.

—   Regístrenlo —La orden parecía ser para el rubio del grupo, el cual hizo caso y me tomó de un brazo y registró cada zona de mi cuerpo— Cuidado, amigo, no eres mi tipo.

—   Al notar que estaba limpio me dio un empujón y me hizo llegar hasta Destiny— Mírala —Me dijo quien la retenía— pobrecita —acercó sus labios a su mejilla y le dio el beso más repulsivo que pude ver, mi estomago se retorció— está asustadísima.

La soltó bruscamente y la hizo caer al suelo, le hizo un gesto a dos de ellos para que la recogieran del suelo y junto con el otro me hizo sentar en una silla, comenzaron a amarrarme y no luché.

—   Muy astuto el no luchar en contra, pero no al venir solo, si te mueves la asesino —Susurró rozando mi oreja.

Ambos se colocaron en frente, desde donde estaba podía ver como Destiny seguía luchando para que la soltaran, no distinguía si aquello que rodaba en su rostro eran lágrimas o sudor, fue justo en ese instante en el que mientras la observaba dieron el primer golpe, no me lo esperaba así que dolió momentáneamente, mi quijada parecía estar ardiendo internamente.

—   ¡Malditos imbéciles, déjenlo! —Destiny comenzó a luchar aún más, no estaba desesperada, estaba furiosa.

—   ¡Cállale la boca, Marcus! —Así que ese era el nombre del rubio, pensé.