Me encontraba caminando de aquí a allá acompañado por mi compañero Nathan, comentábamos al respecto de las pequeñas pistas que se tenían sobre el grupo al que se le llamaba Grupo Z, Nathan parecía algo desanimado al notar la delantera que nos llevaban, pero le dediqué una sonrisa y le di unas palmadas en la espalda felicitándolo por sus avances con el caso, un policía desanimado nunca era bueno para nadie, al llegar a la sala de descanso tomamos unas tazas y les servimos algo de café en ellas, sería una larga noche de investigación, tomé mi celular y mientras sorbía revisé si habían llamadas perdidas de Colton o textos, nada, como siempre, suspiré resignado y le mandé un texto para preguntarle si había llegado a la escuela, odiaba que hiciese eso porque lo hacía sentir como un chiquillo y era totalmente orgulloso e independiente, pero me gustaba saber que ocurría con el cada ciertas horas, a los minutos recibí mi respuesta: "Si, ya te he dicho que odio esto, nos vemos en casa", guardé el celular en el bolsillo y entonces llegó corriendo uno de los nuevos.
— ¡Señor Jackson! —Parecía cansado.
— ¿Sí?
— El hijo del criminal Randall de nuevo se encuentra haciendo un escándalo —Explicó rápidamente.
— Estaré en un segundo en mi oficina, por favor llévalo allí —Le pedí mientras Nathan lo fulminaba con la mirada.
— Sí, señor —Y entonces comenzó a correr nuevamente asustado.
— ¿Te parece mal si voy contigo? —Nathan había dejado su taza a un lado y fruncía el ceño.
— No, en absoluto, puedes acompañarme.
Al llegar, el chico se encontraba sentado en la silla forcejeando con uno de los guardias.
— Pueden dejarlo y salir —Les ordené.
— Pero, señor Jackson... —Inició.
— Es una orden —Exclamé.
El guardia se fue luego de asentir y entonces el chico suavizó el gesto y me observó, luego a Nathan, no le gustaba su presencia.
— Solo está aquí para ayudarme a hallar una solución —Le expliqué.
— No la hay, mi padre con sus estafas logró que congelaran mis cuentas, ¿Qué hago ahora? Estoy en la calle y él se niega a ayudarme —Parecía molesto y afligido— Ni siquiera me reconoce como su hijo ahora —Susurró.
— ¿Dónde estas viviendo? —Preguntó Nathan.
— Con unos viejos amigos, pero pronto tendré que empezar a robar, nadie me aceptará trabajando en sus negocios teniendo un padre así y una reputación con drogas.
— Miré a Nathan y el hizo una mueca, no lo culpaba ni yo tampoco— ¿Confías en alguien?
— En usted, señor, ha sido quien me ha ayudado como ha podido desde que vengo a visitar al engendro de mi padre.
— Bien, pues te tengo una sugerencia... Pero tendrás que acatar ciertas reglas... —Inicié.
Me encontraba recostado de mi corvette cabrio mirando fijamente a algunas rubias que iban y venía contoneándose para llamar mi atención, Ky y Jason estaban discutiendo sobre alguna película ridícula que habían visto el fin de semana. Me dispuse a acercarme a Jade quien había ahuyentado a las demás chicas y me sonreía coqueta, fue entonces cuando Nate se atravesó en mi camino.
— ¿Qué demonios significa que yo seré el nuevo punto de confianza, eh? —Como siempre estaba furioso.
— No volveré a hablarle a Destiny, es tu trabajo ahora, yo me encargo de lo demás —Susurré.
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El misterio de nuestro pasado (ESPAÑOL)
RomanceTras quedar marcado por la muerte de sus padres y la desaparición de su nuevo compañero de juegos Alex, Colton crece en busca de respuestas, indaga dentro de los peores delitos en busca del culpable y arriesga su vida intentando encontrar informació...