El misterio de nuestro pasado (ESPAÑOL)

Capítulo 20.

Sentí como una luz iluminaba mi rostro y fruncí el ceño, me cubrí un poco y abrí a medias los ojos, me encontré con Colton a medio vestir (usando tan solo unos pantalones de cuadros negros) y un cuaderno en la mano, me miraba con el entrecejo fruncido, pero más que con molestia con curiosidad, mordía sus labios al mismo tiempo haciendo que mis pensamientos se dispararan de una manera perversamente creativa. Le miré inquisitiva.

—   Hola... —Susurré.

—   Haces muchísimos gestos raros al dormir —Me comentó de repente.

—   Por supuesto que no —Me senté bruscamente y Colton sonrió— ¿De qué te ries?

—   Tu cabello es ridículo —De inmediato bloqueó la sonrisa, se tornó serio e hizo una mueca.

—   Recién despierto... —Bostecé.

—   También yo y aún así luzco ridiculamente sexy —Estaba ¿bromeando?

No supe distinguirlo al notar la diferencia entre el tono divertido de su voz y su entrecejo fruncido, pocas veces sonreía o reía, era bastante amargado.

—   ¿Debería irme? —La pregunta salió sin permiso de mis labios.

—   No.. O quizá si... —Titubeó.

—   Ya me voy —Aseguré rápidamente colocándome de pie.

—   Destiny —Me llamó segundos luego de haber empezado a caminar hacia la salida, voltee y entonces tragó en seco antes de hablar

—   Ven aquí un segundo.

Me acerqué a él y entonces me hizo colocar despaldas a él, se acercó lo suficiente como para que nuestros cuerpos estuviesen en contacto y entonces su mano comenzó a descender desde mi codo hasta mi muñeca, el gesto me hizo suspirar, al llegar allí me quitó la cola para amarrarme el cabello, primeramente lo peinó con sus dedos y luego hizo una cola de caballo, me sentía algo desconcertada pero el gesto me agradó y al mismo tiempo me hizo sentir ganas de acercarme y...no de nuevo, no de nuevo iba a pensar en algo así, no dos veces en menos de diez minutos. Salí por la puerta rápidamente y caminé hasta mi casa apresurada sin decir nada más; al llegar me encontré con una escena bastante particular, Nate cocinando mientras silbaba al ritmo de una canción que no identifique, contuve la risa y me acerqué.

—   Buenos días, Nate —Canturree. Su cara se tornó seria y tuve que contener la sonrisa burlona que amenazaba con salir a flote.

—   Lucy... Ella debe tener hambre —Intento explicar.

—   ¿Desde cuando son tan amigos?

—    No lo somos —Respondió a la defensiva.

Entonces antes de que pudiese responder su celular sonó y corrió a atender, contestó y me hizo una ceña para indicarme que hablaría afuera, asentí y entonces salió. Vigilé que los huevos revueltos de Nate no se quemaran y minutos después Lucy bajo susurrando el nombre de Nate, al notarme allí abrió los ojos como platos y yo arqueé una ceja.

—   ¿Desde cuando tu y Nate se llevan bien?

—   No lo hacemos —respondió rápidamente.

Le serví a Lucy y esta empezó a comer en silencio, más tarde Nate entró y todo se tornó raro, el se limitó a ver la televisión y Lucy a comer, ni siquiera se miraban, decidí subir a mi habitación a darme una ducha y así lo hice, me relajó bastante pero al mismo tiempo me dio tiempo para pensar en Colton y en lo genial que se había comportado ayer... ¿Que había cambiado? Me envolví en una toalla y salí del baño, me senté en mi cama y suspiré al ver al gato de Lucy mirando alerta a mi balcón.