¿Que dónde fue que me enteré de que estaba en espera de un nuevo integrante? La respuesta era fácil de responder.
Aquella tarde en la que salimos al restaurante y que me acercarán mi comida tuve un repentino asco que termine decorando el piso de lo que no había comido en la mañana más que tomado un café. Luego fuimos al hospital por la tremenda preocupación que se le metió a Derek al verme en ese estado, Melissa nos dió la tremenda y hermosa noticia de que si estaba embarazado. Vaya fertilidad que tenía.
Luego de recapitular nuestros encuentros caí en cuenta de que cuando me marco nunca tome algún anticonceptivo. Y bueno, luego de que habláramos las cosas decidí tenerlo. Con mi panza redonda luci un traje gris en nuestra ceremonia, no hubo luna de miel hasta que concebí a una hermosa bebé de ojos cafés, cabello negro, piel pálida y limpia de lunares. Joel y Leo ganaron, su pequeña hermana se terminó llamando Mili Hale Stilinsky. Ellos también fueron registrados con el apellido de Derek como debía ser. Se habían encantado tanto de su hermana que siempre la estaban cuidando en casa y fuera de esta.
Joel y Leo con 16 años en vez de dejar de ser sobreprotectores con su hermana terminaron siendo casi sus guardaespaldas. Derek por algún milagro dejo de ser muy sobreprotector con ella cuando entro a la preparatoria, aunque sabía muy bien por qué. Estaba tranquilo porque sus hermanos la cuidaban. Entre él y yo quedamos en solo tener tres hijos, nos sentíamos completos así.
-Papá- reprochó Mili a mi lado.
-Jole dejen a su hermana tranquila- regañe a los dos que entraron al salón.
-Pero quiere ir a una fiesta ¿Acaso sabes lo que pasa en esos lugares papá?- preguntaron cruzados de brazos. Ante la mención de "fiesta" Derek entro.
-¿Quién irá a la fiesta?- preguntó con un cucharon en su mano.
-Mili- la apuntaron.
-No, no irás a ninguna fiesta. Estás muy pequeña para eso- nego en desacuerdo.
Masaje mi cien al escucharlos a los tres.
Tenía que sacar mi as. Le di una mirada a Mili que entendió a la perfección.
-Estoy esperando un bebé- y el sonido del cucharon sobre el suelo me hizo suspirar. Leo y Joel se apresuraron a arrodillarse frente a mi.
-¿Tendremos otro hermano?- Derek se quitó su mandil poniéndose en la misma posición que ellos.
-Amor.
Aguante una fuerte carcajada mordiendo mi mejilla por dentro. De reojo ví como Mili abría la puerta con su chaqueta y bolso en sus manos. Sabía que estaría bien porque el hijo de Scott estaría con ella. Eran mejores amigos junto a otros.
Gracias a la madre luna de que era mentira lo de un bebé si no mi pequeño o pequeña pasaría por todo lo que pasó Mili desde que era una recién nacida.
-Espera- Derek se detuvo en pasar su mano por mi estómago- Nos hemos estado cuidando, tú tomas tus pastillas- los cables de los tres hicieron "Clic", se pusieron de pie de inmediato- ¡Vayan a cuidar de su hermana!- Gritó. Leo y Joel salieron corriendo de casa a toda prisa- No me hagas esas bromas amor- frunció su ceño- Sabes que me encantaria tanto tener otro cachito de nosotros- borre mi sonrisa.
-Lo siento- me disculpé jalando de su mano para besar su cuello.
-Sabes cómo me gusta que te disculpes- susurro en mi oreja.
Con una enorme sonrisa asentí poniéndonos en pie para subir a la habitación.
Al dar las 7 de la tarde salí de casa, Derek se había quedado en su despacho luego de nuestro momento solos.
Cuando pare el coche fuera de la casa de la amiga de Mili baje encontrando a mis dos hijos sentados en las escaleras.
-¿No tendrían que estar dentro?- sonreí al saber por qué no estaban dentro.
-Son puras chicas, Dan es el único chico que está con ellas platicando de....- se quedó callado sin decir más mirando al suelo.
-Deberían dejar a su hermana, ustedes van a fiestas más que ella y nadie les dice nada- regañe.
-Pero nosotros somos sus hermanos y tenemos que cuidarla papá- se quejo Leo.
-Y yo soy su padre así que desde ahora no saldrán de casa- me hice espacio para subir los escalones.
-Nono, está bien. Le dejaremos su respectivo espacio- se apresuraron a decir poniéndose de pie lo dos.
Sonríe abriendo la puerta.
-Mili es hora- avisé dentro de la casa.
Mi hija salió con su hermoso vestido rosa que era tapado de los hombros con su chaqueta de cuero. Tenía un lindo peinado de moño.
-Voy papá- se acercó a sus amigas para despedirse al igual que con Dan.
Una vez se despidió de cada una se apresuró a tomar mi mano para salir de casa al coche donde sus hermanos estaban sentados detrás.
-Debiste ver sus caras cuando entraron a la casa todos alarmados- comentó con una sonrisa divertida.
No me costaba mucho hacerme una imagen de sus expresiones. Los conocía a la perfección que nada se me podría pasar por alto. No les gustaba la piña, les daban miedo las lagartijas. Les gustaba el color azul marino y adoraban los perros.
Tenían uno que otro lunar en zonas no visibles, había uno que tenían en un lugar contrario, mientras Leo lo tenía en su abdomen del lado izquierdo, Joel lo tenía en el lado derecho. Los tres eran lo mejor que me había pasado en la vida junto a Derek. Mi papá los amaba como su abuela y tío/abuelo. Tanto el último que les había comprado una moto a Joel y Leo que queda decir; no se las deje. Estaban bajo llave en la cochera de mi padre. No pensaba arriesgar sus vidas en esas cosas peligrosas. Era mejor un Jeep que algo de dos ruedas. Derek también estuvo de acuerdo que terminamos comprando un Jeep rojo que a los dos les encantó. En ese se iban los tres a la escuela y regresaban a casa donde los esperábamos junto a Calvin que ya era un adulto que se había enseñado a respetar el lugar de trabajo de Derek ¿Y cómo no? La última vez que destrozó sus papales lo persiguió con un periódico por todo el pateó.
Fin...
Bueno pues hemos terminado está hermosa historia también. Vaya, luego de que se me fueran las ideas de cómo seguirla la termine. Espero que les haya gustado y si ustedes quieren pueden tener una segunda historia basada en los hijos de ellos. Lo estaba pensando y es decisión de ustedes.
Dejen sus votos y comentarios aquí❤️
Publicada: 01 de febrero del 2022.
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El Papá De Mis Hijos (COMPLETA)
Fanfic- ¿Hombre malo papi?- preguntó inocentemente Joel. - Es sólo un viejo conocido cariño- conteste caminando con los dos al sillón donde me senté con ellos en mis piernas. - ¿Viejo amigo?- preguntó Leo. - Así es, pero si lo llegan a ver fuera de casa o...