La Hermana De James Potter [Remus Lupin]

Ya basta Wood

Sábado 3 de febrero de 1973

Lyn Potter.

Ahora con una pala estaba cavando un hoyo afuera de la cabaña de Hagrid.

—Gracias por dejarnos usar tu patio, Hagrid —decía Daniel mientras me miraba.

—Umm si, todo por el Quidditch —Hagrid rio— tengo que irme, que todo vaya bien con su entrenamiento.

—¡Adiós Hagrid!

—¡Maldita sea! —exclame— ¡esto pesa demasiado!

—Ese es el punto Marilyn.

—¿Para que estoy cavando un maldito hoyo? —pregunte.

—Para nuestra tumba si perdemos el partido —Daniel rio.

—Muy gracioso.

—¡No te dije que pararas! ¡Sigue paleando!

***

Llevaba como dos horas entrenando con Wood, y en ninguna hora me había subido a la escoba. 

Estaba tan cansada.

—¡Ahora abajo! ¡Dame 10! —grito Wood.

—¿10 que? —maldito psicópata— ¡Estoy muy cansada!

—10 flexiones, ¡vamos! ¡abajo!

Hice lo que me pidió lo más rápido que pude, lo que me canso más.

—No no no, con las palmas abiertas no, hazlo con los nudillos.

Te odio.

—Bien, pero si me muero será tu culpa.

***

—Súbete a tu escoba —pidió.

—¡Por fin! —grite.

Me subí y al momento que lo hice una bludger fue directo a mi cara, logre esquivarla por poquito.

—¡¿Qué diablos fue eso?! —le grite.

—¡Esquiva las bludgers!, ¡demuéstrame lo ágil que puedes ser!

Oh, te demostrare lo ágil que mi puño ira a tu cara.

Wood siguió arrojándome Bludgers a diestra y siniestra por veinte minutos.

—Una vuelta a la cancha y terminamos —ordeno Wood.

Terminamos.

Estaba exhausta.

Estaba cansada.

Estaba angustiada.

Estaba adolorida.

Y más importante.

ESTABA ENOJADA.

Baje de la escoba y fui directo a el.

—Te he vigilado —empezó.

—Oh bravo, tenemos un mirón —dije señalándolo.

—No soy mirón, solo observador-

—Es lo mismo.

—¿Me dejaras continuar? —pregunto y yo no conteste—, te he VISTO, y he notado que tienes problemas de ira.

—¿Qué?

—Así que concentra esa ira y úsala para los partidos, nos vemos.

Y se fue sin más.