Ahora Que Te Tengo

Enfermo

Quién diablos se creía Carlos, podría estar super buenísimo ser un hombre encantador, sexy con los ojos azules más bellos que he podido ver en mi vida y por supuesto ser sumamente bueno con sus dedos también, pero en este preciso instante se estaba comportando como su fuese el rey del mundo y yo un simple más de ahora su larga lista.

--- ¿ Sabes una cosa?.. dije levantándome del banco, ya estaba lista para subir a mi habitación. Antes admiraba tanto ver y escuchar hablar de ti como el hombre, respetuoso, caballeroso y sobre todo educado, todo el mundo hablaba de ti no solo por tu trabajo si no por tu tan admirado comportamiento, cualquier otra actriz quisiera trabajar a tu lado siempre pero ahora solo te has empeñado en poner una coraza¿para que Carlos?, Para que no te lastimen, para no mostrarte débil.

Carlos solo me miraban escuchado todo el montón de cosas que estaban atacadas en mi garganta desde hace días, pero este momento tan íntimo me dió el valor de decirle lo que sentía y pensaba de él.

--- Ve a tu habitación Carolina.. dijo y si no lo conociera tan bien, no me hubiese dado cuenta que estaba sumamente enojado sus ojos echaban chispas, pensé que no le daría importancia a lo que le decía pero evidentemente si le afectaron, al llamarme Carolina solo me demostraba lo frustrado que estaba.

--- Buenas noches Carlos. El solo asintió con su cabeza.

--- Buenas noches Carolina.

Fui a mi habitación como alma que lleva el diablo, al menos había sacado un poco de la rabia que sentía ¿Cómo alguien puede exitarme y al mismo tiempo hacerme enojar tanto? Si mi amiga Valentina estuviera aquí definitivamente diría que la mejor forma de solucionar las cosas eran teniendo sexo salvaje y duro, no puedo evitar de reír ante el recuerdo de sus comentarios, pero ahora solo tenía ganas de golpearlo justo en los huevos, pero también sentía ganas de bajar y besarlo si me estaba viviendo muy loca lo sé.

En cambió entre a mi habitación me duche por un largo rato lista para dormir agradecí a mi representante por haber escogido este hermoso hotel, a pesar de no ser tan costoso y mucho menos de lujo sus habitaciones eran inmensas y cómodas bueno al menos la mía lo era.
Al transcurso de un par de hora no me había dado cuenta cuanto tiempo pase metida en mi celular viendo mis redes, no tenía sueño y eso era muy evidente, justo antes de poner mi celular sobre la mesa de noche, avisando que un mensaje había llegado era mi representante que me indicaba ir a buscar a Carlos que no contestaba sus llamadas y le parecía raro. Lo que me faltaba tener una escusa para irlo a buscar. Me levanté de la cama y fui en busca del aridiente pero ahora odioso Carlos, fui a su habitación que por cierto estaba a solo tres puertas de la mía  , toque su puerta pero no estaba segura si aún seguía en el bar del hotel así que volví a tocar, di un toque más al notar que nadie abría di la vuelta sobre mis pies para regresar a mi habitación cuando la puerta se abrió.

Conseguí a Carlos vestido solo con sus jeans por inercia mis ojos se posaron sobre su pecho desnudo, a pesar de ser un flojo para ir al gym y no tener los abdominales tan marcados se veía tan bien. Había algo encendido en su mirada.

--- Mierda caro deja de mirarme de esa forma. Rápidamente quite mis ojos que se lo querían comer en ese instante.

--- Perdón es que blanco me pidió qu...

Quede sin habla al mirar detrás de él había una pelinegra en ropa interior esperándolo con un tragó servido en su mano. No dije más nada salí corriendo de ahí entre a mi habítacion dejando caer todo el peso de mi cuerpo sobre la puerta me encerré sintiéndome tan mal, ¿Por qué tenía que estar tan molesta? Hace rato le dije que no volvería a tocarme pero ahora que lo veía con otra mujer me sentía ¿Celosa? Enserio estoy celosa, tenía que estar clara que está ahora era su vida andar de mujer en mujer hay pero eso me estaba doliendo un mundo yo me había enamorado de Carlos, pero antes de darme cuenta jugué con él, lo tome y lo deseché cuando quise , esto era mi culpa y no pida juzgarlo ahora antes los ojos de Carlos yo solo soy un culo más.