¿Seguimos con el juego?

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Cepille mis dientes y me vestí con una franela de Carlos que llegaba un poco más debajo de mis muslos, cuando sali del baño el estaba en su cama con  teléfono en mano, no se porqué accedí a quedarme, en realidad si sabía quería pasar más tiempo con él y de paso sus invitados tuvieron que quedarse porqué él vehículo que los iba a trasladar a su hotel simplemente no encendió quizás esa fue la escusa perfecta para Carlos decirme que debia quedarme siendo su novia se veía de muy mal gusto que me fuera y dejara a sus invitados aquí solo. Se que todo le salió perfecto, el muy bien los hubiese llevado en su camioneta pero ¿adivinen que?, Su camioneta tenía una falla también mucha casualidad.Los señores Finlay dormían en la habitación de invitados ya que el no tuvo problemas en ofrecerles que se quedarán en su casa.

Dejo su teléfono a un lado de la cama dándome una pequeña sonrisa, parecía disfrutar mucho este momento y no le importaba demostrarmelo en cambio yo me sentía incómoda la verdad es que no me gusta mentir, los señores Finlay son muy buenas personas y me da pesar tener que mentirles por seguirle el juego a este.

--- ¿Sigues enojada?. Pregunto

No me dió tiempo a responder en ese momento me tomo por la cintura arrastrándome a su cuerpo dejándome muy cerca de él, muy a pesar de estar brava mi cuerpo reaccióno tan bien que encaje perfectamente a su cuerpo.

--- Me conoces, Carlos, esto está mal no está bien que estemos diciendo que somos novios.

--- ¿Por que no?

--- Porqué no lo somos. Casi que grite.

--- Creo que hay algo más que te está incomodando.

La verdad era que estaba incomoda, el venía de estar con no se cuántas mujeres las cuales muchas han sido nombradas en los médios de comunicación y hoy de pronto sale diciendo que somos novios frente a unas extraordinarias personas y eso no me hacía sentir bien.
Lo mire aunque no quería hacerlo, Carlos tomó un mechón de mi cabello y lo llevo detrás de mi oreja, quería estar con él así pero también me molestaba la idea que posiblemente antes de estar yo aquí el estuvo saliendo con otra o el recuerdo de cuando lo ví en el hotel con ese otra mujer quería odiarlo pero mi realidad era otra lo quería pero el solo estaba jugando y yo de boba le seguía el juego.

--- No puedes andar con mujeres por ahí y venir a decir hoy que soy tu novia, besarme delante de tus invitados y de paso decir todas esas cosas bonitas.

Una lenta sonrisa se fue formando en su rostro, no sé si quería pegarle o besarlo pero podría pegarle y luego besarlo. Ven estoy a punto de volverme loca.

--- Tal vez.. si pueda. Se encogió de hombros. Pero no me dejó seguir diciendo nada porqué siguió. --- No sé lo que este pasando aquí, no tengo la respuesta.

Asentí no tenía nada que decir porque era verdad, había algo que ningúno de los dos aceptaba y de paso no le poníamos etiqueta.
Pero adivinen que se le ocurrió hacer a este hermoso pollito Rico, comenzó a sacarse por sobre su cabezas la franela que traía puesto y después de esto ya no se que paso conmigo, Carlos me daba el mejor sexo oral de mi vida, no podía dejar de pedir que está noche no se acabará nunca para no volver jamás a la realidad.

En la mañana me sentía como en una nube Carlos me llevaba a mi casa después de llevar a sus invitados al hotel, vieron que era cuento de la falla en su camioneta. Está vez no me moleste en hacerle desayuno no estaba dispuesta a su rechazó otra vez. Cuando me desperté en su cama totalmente desnuda ya el se había levantado incluso ya estaba vestido así que tuve que hacer lo mismo con la pereza pegada a mis pies.

--- Y bien... Pregunté

El giro por un momento sus rostro para mirarme.

--- ¿Que es lo que quieres Carolina Ramirez?. Pregunto

<A tí>  pensé

--- ¿A qué te refieres Torres?. Puedo querer muchas cosas.

Nego con la cabeza y comenzó a reír.

--- ¿Mañana tenemos el taller no?

--- Te quiero a tí.. eso es lo que quiero. Listo lo solté.

El cambio Totalmente su gesto y se puso serio, apretó la mano sobre el volante y suspiro.

--- Yo también quise mucho... Pero solo te fuiste.

Hay yo se que es verdad y soy tan estúpida pero de verdad lo quiero, necesito estar con él.

--- Tienes razón, no me pares bola sabes que a aveces digo las cosas sin pensarlo.

--- No sabes cuánto amo cuando dices las cosas sin pensar tanto.

Mi teléfono comenzó a sonar rompiendo por completo nuestra burbuja, era mi adorada Mabel que se encontraba a las afuera de mi apartamento esperandome. Unas cuantas calles más ya estábamos frente a mi dulce hogar. Bien ahora que digo si lo único que quiero es saltar sobre él y besarlo hasta el cansancio.

--- Bueno nos vemos mañana. Dije, Ambos nos quedamos viendo y sentí mariposas, avejas, hormigas cualquier cantidad de inseptos en mi estómago.

--- Hasta mañana Caro Ramírez. Puso su vista al frente.

--- ¿Seguimos con el juego?. Pregunté

Giro su rostro posando sus ojos sobre los mios y me deje llevar lo tome por las mejillas y pegue mis labios sobre los de él dejando tres presiones sobre sus labios, me alejé y baje de su camióneta sin decir más nada.




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