Ahora Que Te Tengo

Sorpresa

--- ¿Será que tú y Carlos pueden devolverme mi trabajo?. Le pregunté a mi representante hastiada de tener que estar encerrada sin hacer nada. --- Oh es que ya conseguiste una nueva actriz.

Solo pude escuchar la carcajada de Carlosal fondo del teléfono. Había ido al médico para darme el alta, ya me encantaba en perfectas condiciones al punto que podía correr sin ningún problema. Sin embargo Carlos seguía insistiendo que terminará completo el reposo, y me molestaba mucho porque él más que nadie sabe que odio estar sin hacer nada.

--- ¡Jamás¡... Exclamó. Tú eres mi preferida Caro.

--- No parece. Aseguré.

Extrañaba pasar tiempo con mis otros compañeros pero sobre todo con él. Obviamente el venía a diario pero desde que comenzaron a exigir más con la producción no había tenido tiempo.

Blanco, se despedio de mí, le dió a Carlos unas indicaciones y le pasó la llamada a él.

--- Bueno, este fin de semana debo ir a Miami, es para promociónar algo, si quieres puedes venir conmigo. Me encantaba siempre salirme con la mía.

--- Hay... Papi no puedes vivir sin mí. Dije, feliz de haber logrado lo que quería. Y pues quizás dirán que estos últimos días me he convertido en una depravada sexual, pero es que mi cuerpo lo necesita en todas las posiciones habidas y por haber. Carlos se tomaba muy en serio mi salud, demasiado para un hombre tan caliente como él.

Quedamos en que pasaría por mí temprano en la mañana, así que fui a mi habitación a organizar mis cosas en una meleta. Ya mamá no se quedaba conmigo así que le envié un mensaje avisándole que viajaría con Carlos. La noche se hizo súper corta, me di cuenta porque la luz del día me despertaba del profundo sueño en el que caí y ni cuenta me dí. Mientras esperaba que Carlos llegase por mí, decidí enviarle un mensaje, solo para molestarlo.

Carolina

Solo espero que esté viaje incluya muchas más cosas de las que ya me imagino que podríamos hacer.

Su respuesta llego súper rápido, y solo reí con imaginar lo que iba a decir. Al no tener a nadie a mi alrededor era pinto a mi favor así nadie vería la cara de excitadacima que he tenido todos estos días.

Carlos

Caro Ramírez

Déjame decirte que tengo una lista muy interese de cosas que vamos hacer y espero que salga todo a la perfección.

Es más, ponte una falda y no uses ropa interior para que cuando estemos sentados uno junto al otro pueda acariciarte y encontrarte lista para mí.

Y la orden es: nada de peleas, solo puedes darme cariño, besos pero sobre todo muchas caricias... Aunque confío más en tu creatividad que en la mía ya que tú sentido de aventurera es mucho más elevado que el mío.

Reí como una puberta en medio de una crisis hormonal, no le seguí enviando esperando que viniera por mí. Hora y media después me encontraba con Carlos dentro del avión, el muy concentrado tecleando en su celular un poco distraído para mis gustos.Una lenta y pervertida sonrisa apareció en sus labios, que se agrandó cuando comencé a mover mis cejas. Deslizó su mano por mi pierna pero justo en ese momento se nos acercó la aeromoza para ofrecernos algún alimento. El viaje se me hizo muy corto, Carlos en todo el viaje no hablo mucho, se mantuvo ocupado me sentí un poco ignorada. Quería ahorcarlo, pero me mantuve serena, mirando hacia las nubes, hasta que por fin llegamos.