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-¿Y si lo golpeamos con un sartén? -Natsuo comio una de sus papas viendo a sus hermanos.

-¿Estas pendejo o qué? 

-¿Tu qué crees?

-Deberiamos comenzar a contarle todo poco a poco -dijo Fuyumi bebiendo de su malteada.

-No es mala idea -secundo Natsuo y Touya solo pudo ceder ante la mayoría.

Entonces el sábado llego, con ello el día en que los chicos irían de compras con su menor. Llegaron al centro comercial el menor iba al frente con Fuyumi y Touya a sus costados, Natsuo iba detrás como un patito bebé detrás de su madre.

-¡Mira Sho!, ¿No es linda esta falda? -Fuyumi le mostro la prenda una falda tableada color celeste pastel.

-Muy corta -negó Touya quitandole la falda tomando una dos dedos más larga -mejor esta.

-No soy una chica -refunfuño el menor yendo hacia la ropa deportiva tomando un par de sudaderas y un par de jeans.

-Pero antes te encantaba usarlas, nunca te ha importado eso. ¿Qué es diferente ahora? -cuestiono Fuyumi viendo a sus hermano con ojos preocupados.

-No soy una chica. Papá tiene razón, soy un hombre debo comportarme como tal.

-Un verdadero hombre sería fiel a sus ideales -Natsuo dejo un sueter sobre el hombro del menor viendolo directamente a los ojos -si vas a usar lo que Enji quiere que uses, debiste llamarlo a él, no a nosotros -el albino se dio la media vuelta dandole una ultima mirada a sus hermanos dejandolos en la tienda.

-¿Qué te parece esta camisa?, empezará a hacer calor -Touya le mostro una camisa de manga corta totalmente negra con algunos detalles en blanco busco algo más y saco esta vez una camisa con el logo de guns n'roses -¿Qué tal esta?, aunque no sé si aún te guste el rock. Papá prefiere a Pavarotti.

-El rock esta bien -respondió tomando ambas camisas sintiendo unas más siendo dejadas en su hombro.

-Necesitarás ropa formal, después de todo, comenzarás a ir a las juntas de papá, ¿no?

-¿Antes no iba?

-Nunca has sido cercano al viejo -respondió Touya buscando algunos jeans, Fuyumi se había alejado de ahí yendo hacia donde había trajes dejando a ambos chicos juntos- en realidad, hasta hace poco ni siquiera tenías amigos.

-¿Enserio?, pero, en mi celular había varios contactos de muchos chicos.

-Desde que hablaste con ese chico rubio comenzaste a abrirte un poco más, por lo que veo no funciono mucho, o más bien... Duro poco -Touya suspiro terminando de elegir ropa tanto para él como para Shoto -vamos por Yumi.

Puede que Shoto volviera a cerrarse.

Puede que no fuera el mismo de antes.

Pero podía sentir la tristeza de su hermano mayor.

Podía sentir la preocupación en los demás.

Y aquello lo hacía sentir... Extraño.

Contrary.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora