EP 05

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El viernes, Yeonjun va a su trabajo principal en una joyería; ahí es donde conoció al dueño del club que lo introdujo en el rap callejero y clandestino hace tres años

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El viernes, Yeonjun va a su trabajo principal en una joyería; ahí es donde conoció al dueño del club que lo introdujo en el rap callejero y clandestino hace tres años. Los atletas y los raperos siempre vienen en busca de joyas aquí, es un lugar popular ya que se encuentra en la calle más concurrida del distrito de Gangnam. La tienda tiene horribles luces de neón azul pálido y verde que cubren cada esquina.

Mientras espera que un boxeador elija qué anillo de oro de veinticuatro quilates quiere, el recuerdo de Yeonjun del jueves por la noche se distorsiona. De repente, en su cabeza, el chico de la pelea callejera está rodeado por una luz de neón azul y púrpura, haciendo que las pequeñas gotas de lluvia en su rostro brillen y reflejen las luces tal como lo hacen los diamantes en los anillos dentro del escaparate de cristal debajo de sus manos. De alguna manera, en el recuerdo de Yeonjun, sus ojos se ven más tristes de lo que eran en la vida real. Tal vez el chico estaba triste, y tal vez Yeonjun pudo ver más allá de la ira en su mirada.

Yeonjun trabaja en su música mientras fuma en la hora del almuerzo, antes de volver a entrar a la tienda y comenzar su siguiente turno. Tarde en la noche, de vuelta en su desordenado apartamento, escribe letras mientras come restos de comida china y un poco de pastel de chocolate infundido con hierba que una fan le dio hace una semana.

Durante todos esos momentos, incluso cuando Yeonjun va a diferentes batallas de rap clandestinas por la ciudad —en la noche, para ganar dinero extra—, la imagen del chico ensangrentado bajo la lluvia lo persigue, lo acompaña y llena su cabeza con ideas y pensamientos para utilizar cada vez que rapea.

Palabras, pensamientos y rimas, derramándose a su alrededor como gotas de lluvia golpeando los ojos salvajes del chico, manchando su papel como gotas de sangre en el rostro enfadada. Los raps de estilo libre de Yeonjun terminan siendo mucho más violentos y sexuales de lo habitual.

En la noche siguiente, sábado por la noche, vuelve al club y repite su rutina habitual. Wooseok habla sobre este chico nuevo que viene a rapear mientras se pone una camisa limpia antes de actuar; Yeonjun lo escucha atentamente mientras se cambia los aretes frente al viejo espejo colgado en la puerta del baño. Tomó prestado un par caro de la joyería, son plateados y pesados, lo que significa que son de mejor calidad. Algún día tendrá suficiente dinero para comprar una cadena de allí, piensa; pero por ahora, se conforma con tomarlos prestados.

Yeonjun rapea en el escenario, trata de buscar una cara en la audiencia, pero todo lo que vislumbra son las brillantes luces reflectoras encima de él; bebe una cerveza fría y fuma un par de caladas de marihuana en el cuarto del backstage con el resto de los raperos, y luego sale. Se vuelve a cubrir el rostro cuando las luces de neón caen sobre sus ojos, ve a un chico guapo y ve a una chica linda, el club está lleno esta noche y hay mucha gente atractiva al rededor, pero sigue buscando un par de ojos en particular. Va al bar, habla con unos chicos y bebe otra cerveza con ellos, luego se aleja y enciende un cigarro en el pasillo oscuro antes de abrir la puerta trasera.

Rumor | yeonbinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora