EP 27

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En el camino de regreso, Sol-I vuelve a sentarse entre ellos. La ventana de Soobin está abajo y sus ojos están cerrados mientras el aire frío y húmedo golpea su rostro. Todavía sostiene la camisa húmeda de Yeonjun, apretándola en su puño. Yeonjun también mira por la ventana. Pasan junto a un letrero de neón violeta y el cielo gris se ilumina con un rayo azul pálido. Comienza a llover tan fuerte como Soobin estaba llorando antes y el golpeteo de las gotas de lluvia rompiendo en el asfalto de alguna manera consuela a Yeonjun.

Su apartamento es un desastre, pero no podría importarle menos.  Soobin y Sol-I miran a su alrededor pero, a diferencia de Sol, esta no es la primera vez que Soobin está en la casa de Yeonjun. Después de quitarse los zapatos y dejarlos en la puerta, Soobin va directamente a la cocina y se come casi todo lo que hay en la nevera, que en realidad no es mucho, solamente sobras de pizza, bulgogi y jjajangmyeon.

Mientras tanto, Yeonjun busca ropa limpia para dar a sus invitados como pijamas; sus pantalones como los de Soobin todavía están húmedos, y la falda de cuero Sol-I debe ser incómoda. Cuando encuentra algo decente en su armario, le da la ropa doblada a la rubia y ella va al baño a cambiarse.

Yeonjun no lo mira a los ojos mientras Soobin se llena de comida, pero deja un vaso de agua fría frente a él y dos analgésicos.  Soobin murmura un "gracias" pero tampoco lo mira.

Sol-I se cambia a una camiseta desgastada de Yeonjun y conserva los shorts que llevaba debajo de la falda, pero son demasiado cortos y la camiseta vieja le queda demasiado grande, por lo que sus piernas quedan a la vista una vez que sale de la habitación.  baño. Yeonjun trata de no mirar por respeto, pero Soobin murmura un lindo "Me gustan tus piernas delgadas" con una voz tierna y la boca llena de fideos, es un comensal desordenado por lo que tiene un poco de salsa jjajang en la comisura de los labios, los dedos del pelirrojo pican por acercarse y limpiar la salsa. Yeonjun se ríe por lo bajo y Sol-I suelta una gran carcajada, con las mejillas sonrojadas ante el comentario.

— Soobin, tus jeans todavía están húmedos y estás ensuciando la silla de Yeonjun ¿No te vas a cambiar? —suspira cuando Soobin no responde. Acaba de sufrir una crisis nerviosa y todavía hay demasiadas sustancias en su sistema— ¿Necesitas ayuda para cambiarte? —pregunta ella lo más suavemente que puede antes de acercarse, él niega rápidamente con la cabeza.

— Puedo ayudar... —sugiere Yeonjun, tratando de sonar tranquilo y gentil.

Sol-I asiente de acuerdo con él pero Soobin niega con la cabeza una vez más y empuja el plato terminado de fideos negros antes de tragar los analgésicos y tomar el agua de dos largos tragos.

Rumor | yeonbinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora