El oscuro deseo de Alexander (Libro #4 serie Oscura +21)

Capítulo 34. La trampa

Allison 

Alexander se encontraba de pie en la entrada, con el móvil en las manos y la mirada fija del otro lado de la calle. No vi a nadie en la otra acera, pero por la tensión en sus hombros y la forma en la que sostenía su teléfono parecía haber visto algo que lo había dejado perplejo y eso me puso alerta. Me separé de la ventana y camine apresurada hacia la puerta, no sé porque dude en abrirla, pero luego de un segundo tome valor y salí a su encuentro.

— ¿Qué pasa? —le cuestione, él se giró hacia mí y pude dos cosas en su mirada que ni siquiera en la situación más difícil había visto antes. Angustia y miedo.

—Nada —respondió cortante —, pensé haber visto alguien conocido del otro lado de la calle, pero parece que solo estoy algo tenso —Y no sé porque presentí que aquello era mentira — ¿Me dejas pasar? —pregunto ahora y yo me hice a un lado para que entrara.

No pude evitar mirar nueva vez antes de cerrar la puerta, sin embargo solo vi a Rose la vecina de enfrente asomarse por la ventana, sin embargo una extraña sensación de que algo pasaba parecía no querer abandonarme y después de descubrir lo de Eric, sabía que sería demasiado difícil mantener la calma. Alexander camino hacia la sala de descanso y se acomodó de manera tranquila sobre el sofá, pero sabía que algo no estaba bien y presentía que el había venido hablarme sobre ello.

—Siéntate a mi lado —me pidió y me acerque donde se encontraba. Me acomode junto a él y cuando me tomo de la mano me invadió una terrible sensación que no podía siquiera expresar en palabras.

—Alexander —me apresure a decir, pero este coloco sus dedos sobre mis labios para silenciarme.

—Quiero que me escuches y prometo que, si después de lo que voy a decirte sobre mi pasado lo que quieres es alejarte de mí lo aceptare —no pude evitar mirarlo de la forma en que lo hice con una mezcla de temor y tristeza, entonces aparte su mano de mis labios, la sostuve con firmeza y me acerque a su rostro para dejar un beso sobre sus labios.

—No me importa lo que haya pasado en tu vida, tu pasado esta atrás no quiero que te atormentes por ello —, pero al mirar sus ojos comprendí que esto quizás sobrepasaba todo lo que podía imaginar.

—No sé cómo pasó, pero esto, Eric, Marco, Di Ángelo y todos los involucrados va más allá de tu pasado con ellos —sabía que mi mirada delataba lo confundida que me encontraba en este momento—también tiene que ver con alguien quiere vengarse de los Lombardi, bueno de Alessio y su familia—todo era demasiado confuso y perturbador.

—No puedo comprender lo que me dices Alexander ¿Que tiene que ver Alessio en todo esto? No tiene lógica para mí —sabía que el horror se podía palpar en mi voz, porque temía descubrir lo que se escondía detrás de sus palabras.

Entonces no lo pude soportar. Me puse de pie, lleve mis pasos hacia mi habitación para poner distancia entre nosotros y escuché sus pisadas fuertes y determinadas detrás de mí; tuve intención de cerrar la puerta, pero este lo impidió antes de que lo hiciera y estaba demasiado aturdida como para ponerme a luchar con él, tampoco era algo que quisiera hacer.

—Allison por favor escúchame —lo observé cerrar la puerta y poner el seguro, ahora aunque no quisiera tendría que escucharlo.

—Si eso que tienes que decir me va a separar de ti no quiero escucharlo, no me digas nada. Me niego a oírlo —se acercó a mí con sumo cuidado y yo por puro instinto di un paso hacia atrás.

Coloqué las manos sobre los oídos como una niña pequeña y este se aproximó hacia mí de nuevo, pero esta vez no me moví. Deslizo sus manos por mis brazos provocando que mi piel se estremeciera y me aparto las manos de las orejas sin aparta la mirada de mis ojos. Acercó mucho más su rostro al mío y me tomo con posesión por la cintura mientras con su mano libre acariciaba mi mejilla.