Hola, espero que disfruten mucho este y los dos siguientes caps, pues he estado trabajando en ellos desde hace literalmente meses, así que gracias y empecemos. PD: no olvide su votito y si quieren comentar.
Nick
Puntual, como dijo, está en mi calle esperándome en un auto color rojo oscuro, no se baja, en vez de eso suena el claxon y así supe que erra ella. Subí en el puesto de copiloto y Sam de inmediato arrancó
—Hola. ¡¿Estás conduciendo descalza?!— pregunto apenas noto que no trae zapaos.
—Eh, sí. Estaba ocupada, tengo mucho trabajo y odio llegar tarde.
Trae un vestido rosa barbie que le ajusta perfectamente la cintura, el cabello con una pequeña trenza de lado, tiene los lentes puestos, lo que es raro porque he notado que sólo los usa cuando trabaja, eso le da un aire de apurada.
—Creo que vamos temprano.
—Sí, pero Valery quiere que la ayude no sé con qué.
Se le nota que tiene prisa por llegar, apenas cerré la puesta Sam arrancó a la velocidad establecida hacia nuestro viejo vecindario.
—No sabía que tenías un auto— la verdad pensé que iríamos en taxi.
—Sí, bueno, lo dejo coleccionando polvo en el estacionamiento, pero de vez en cuando, cuando lo necesito lo saco. Conducir en esta ciudad es un asco.
—Lo sé, aún así los taxistas logran sobrevivir. ¿Puedo cambiar?— señalo el radio. Está concentrada en el camino.
—¿Vas a poner The Fray?— dice fastidiada. Sé por qué lo pregunta eso; era nuestra banda y nuestra canción.
—Voy a poner otra estación.
—Okay— me da permiso,
—No sería mi culpa que en alguna estuvieran sonando The Fray— murmuro tragándome la sonrisa.
—¿Ya ves por qué no te puedo sacar?
—Nunca me sacas— le reclamo como si de una esposa aburrida de su matrimonio se tratara.
El resto del camino no fue muy comunicativo o interesante, sólo ella conduciendo y yo cambiando la radio. Al llegar estaciona justo al frente de su antigua casa; apaga el motor, aun no sé bajaba así que yo tampoco, se estira a la parte trasera y toma sus tacones tipo sandalias y una pequeña bolsa de mano a juego, todos blancos, se puso los zapatos y está a punto de salir del auto, pero la detengo.
Me mira extrañada y le digo —Tus lentes— no se los ha quitado.
Puedo escuchar el pequeño "ah" que emite antes de sacarse los lentes y dejarlos en la guantera. Ahora si se baja y la sigo hasta la puerta de su casa.
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Lo bueno de NO enamorarse
ChickLitNo todos los cuentos son de amor. No todas las princesas esperan a su príncipe azul. No todos los príncipes son perfectos. No todas las villanas son las antagonistas. No todos los cuentos tienen un final feliz... Y Samantha lo aprendió. ~ACTUALIZACI...