No Eres Un Capricho

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-Leonardo esté no es él camino a mi taller- le dijo la pelinegra cuando noto que no había tomado él camino de vuelta a su trabajo.

-lo se, vamos a mi casa- dijo tranquilo.

-debo volver a trabajar y tu también- le dijo a pelinegra.

-podemos volver un poco tarde, ambos somos los jefes- le dijo con una sonrisa seductora.

-tentador, pero debo volver, Aron me está esperando- le dijo.

-pasas mucho tiempo con él- dijo Leonardo.

-estas celoso?- preguntó ella con diversión.

-no estoy celoso, solo digo lo que pasa- se justificó.

-lo que digas, pero de verdad debo volver al trabajo- le dijo.

-no te preocupes será rápido- dijo, llegando a su casa- tiene que ser una jodida broma- dijo molesto al ver los autos que estaban fuera de su casa.

-que pasa?- preguntó la pelinegra confundida.

-pasa que habrán personas despedidas en mi casa- dijo bajando del auto molesto.

Emely bajo confundida del auto y él sacó él vestido de su hija, había decidido ir a la casa porque ya era hora de que Anika saliera de la escuela y sabía, aunque su hija no lo iba a decir en voz alta, que estaba ansiosa porque su vestido para su recital llegará. Al entrar se escucharon varias voces en el salón y la pelinegra entendió porque la molestia de Leonardo.

-pero abuela…- escucharon suplicar a Anika triste.

-No Anika le dirás a tu padre que no lo quieres- sentenció su abuela.

Leonardo frunció el ceño y le paso la caja a Emely mientras le hacía señas para que permaneciera callada, ella sola sintió mientras él entraba en la sala.

-que debe decirme mi hija que no quiera por decisión tuya?- preguntó Leonardo serio entrando a la sala.

-Leonardo, que bueno verte- dijo Laura melosa acercándose a él con la intención de besarlo, pero él la detuvo en seco.

-creí haberte dicho que no te quería cerca de mi hija- casi le grito molesto.

-no alejes a la única buena influencia para tu hija Leonardo- dijo Agata.

-exacto, mi hija, por lo tanto yo decido quién es una buena influencia o no para ella- dijo él para después mirar a su hija- mi princesas porque lloras?- le preguntó mirándola, tenía los ojos tristes y llorosos.

-ella no está llorando- negó Agata.

-No soy ciego Agata- le dijo Leonardo ofendido acercándose a su hija.

-si lo eres con las mujeres con las que te relacionas, o al menos te haces- dijo ella con malicia, pero Leonardo prefirió ignorarla.

-porque esa carita triste?- le preguntó a su hija con ternura. Anika negó restándole importancia- no me digas que no es nada mi amor, porque algo te tiene así- le dijo y ella volvió a negar- bien si no me quieres decir ahora está bien y creo que tengo algo que te quitará la tristeza- dijo- Emely amor- la llamo, sorprendiendo la a las demás.

La pelinegra entro con la gran caja en brazos bajo la mirada molesta de Ágata y Laura, pero la pelinegra ignoró totalmente como si ellas no estuvieran ahí.

-aquí tienes, te dije que te lo daría el lunes- le dijo Emely pasandole la gran caja, Anika sonrió un poco emocionada porque de verdad no le gustaba el vestido, pero había un problema.

Su abuela había llegado justo con Laura cuando ella apenas estaba llegando de la escuela para ir a comprar su vestido para el recital, pero ella le dijo que su padre ya le había mandado hacer un él vestido con Emely, por lo que su abuela enfureció y le exigió que dijera que ya no lo quería, pero ella si lo quería.

-Ahora quieres ganarte a mi nieta con regalos?- dijo Agata impidiendo que Anika tomará la caja.

-no es un regalo- dijo la pelinegra.

-Emely es una excelente diseñadora y le pedí que hiciera él vestido para el recital de Anika- dijo Leonardo.

-lo dudo, llevaré a mi nieta a comprar un vestido adecuado- dijo Agata intentando llevársela.

-Anika no saldrá a ningún lado- dijo Leonardo interponiéndose en su camino para que no avanzara- hija, ven por favor- le pido su padre con calma, pero su hija no pudo ir con él, porque su abuela se lo impidió- Agata no empieces- le advirtió Leonardo y ella soltó a la pelirroja.

-no permitiré que mi nieta pase crezca junto con esta mujer- le advirtió ofendida tomando su bolso.

-enserio Agata?, otra vez?, no vas a ganar- le dijo seguro Leonardo.

-claro que lo haré, cuando demuestre que está mujer es solo una oportunista que le hara dano a mi nieta me darán su custodia- dijo ella segura para después salir junto con Laura.

-ESTO ES TU CULPA- le grito Anika a la pelinegra- pero es lo que querías alejar me de mi papá- le dijo molesta.

-Anika basta- la detuvo Leonardo- la unica que quiere alejarte de mi es tu abuela, no Emely- dijo Leonardo.

-ella me puede llevar con ella?- preguntó preocupada. Ella quería mucho a su abuela, pero quería más a su padre y no quería separarse de él.

-no lo hará, no debes preocuparte por eso- dijo su padre seguro- tu abuela solo lo dice para molestar un rato, pero ella no va  lograr nada- dijo Leonardo.

Solo que le quite su mensualidad- pensó.

Después de un rato que Anika estuvo más calmada, Leonardo fue a llevar a Emely a su trabajo, él solo volvería al suyo para firmar unos papeles urgentes, debía poner a su abogado al corriente de lo que había dicho Agata, porque estaba segura que ella iba a pelear la custodia de su hija, aunque al final la perdiera.

-lo siento- dijo Emley de repente.

-por qué me pides disculpas?- preguntó confundido.

-por él problema que te estoy metiendo ahora- dijo ella.

-no le hagas caso a Agata, ella no va a lograr nada- dijo seguro- ya te había contado que está no es la primera vez que me intenta quitar a Anika y no lo va a conseguir de nuevo- dijo seguro- pero si me preocupa un poco que intente perjudicarte a ti- dijo.

-a mi?- preguntó confundida.

-claro, inventara mentiras sobre ti, haciéndote ver cómo la mala y de hay sacará un caso, porque se basara en que nuestra relación es mala para Anika- le explico.

-y lo dices así tan tranquilo?- preguntó ella.

-estoy tan tranquilo porque ella no va a lograr nada, bueno solo que le quite todo el dinero que le he dado- dijo él seguro- además no dejaré que llegué lejos difamando te- le aseguro- no dejare que te perjudique- prometió besando su mano.