El móvil comienza a dar tono. Todavía hay algunos alumnos que me miran de reojo cuando paso por su lado. Mi pequeño incidente corrió como la pólvora hace ya unos días, antes de que yo dijera algo al respecto.
- ¿Señor Darby?-pregunto cuando me contesta a la llamada.
- ¿Sandra? Ya comenzaba a asustarme.
- ¿Si?-digo no muy convencida por su pregunta.-Perdone, ayer no pude ir como me pidió. Tuve que hacer un trabajo importante con una amiga.
- No te preocupes.-suena acalorado.-Disculpa, estoy haciendo algo de ejercicio por el parque.
"¿A su edad? Impresionante".
- Si quiere podemos hablar en otro momento.-dejo mi mochila sobre la mesa de la cafetería.
- No.-dice con rapidez.-Espera que me siente, anda.-se queda callado por unos segundos.-Agg, ya está. No sé cómo el señorito James me convenció de que debía hacer ejercicio.
- Siempre viene bien.-saco los apuntes de anatomía de mi mochila para dejarlos caer en la mesa.
"Debo estudiar". El examen del otro día fue un desastre, todo el mundo se quejó por el grupo de WhatsApp de que fue demasiado difícil. Aunque todo ello quedó en segundo plano en cuanto me vieron en línea.
"Sandra, ¿cómo estás?"
"¿Te encuentras bien?"
"¿Qué te ha pasado?"
Me hablaron personas que ni siquiera habíamos cruzado palabra en los cinco años de carrera.
Todavía no he tenido clase con Traxler; ayer decidió no venir, al igual que Niller. Así que no he podido preguntarle si me ve a repetir el examen o si va a ser una bruja y no va repetírmelo. "Igual están perfeccionando el plan para matarme". No, no da risa, pero es la única forma de enfrentarlo en la que no me vuelvo loca.
- ¿Sandra? ¿Estás ahí?
- Si, perdone. Estaba pensando en otra cosa.-muevo la cabeza intentando sacar esos pensamientos.-¿Qué decía?
- El otro día me dijiste lo de las descargas eléctricas.
- ¿Si?
- ¿Podrías venir el fin de semana para controlarlas? Es algo peligroso si no se pueden controlar.
- ¿Puedo llegar a hacer daño a alguien?-pregunto preocupada.
- No lo creo. El señorito James me informó de que no te había pasado con alguien más.
- Si, solo con Traxler y Niller.-confirmo.
- O sea, que tus poderes solo salen cuando te sientes amenazada.
- ¿Podría decirse?-entrecierro los ojos. No puedo estar más confundida.
- Aun así vendría bien que vinieras. Conozco a un brujo excepcional con un poder parecido.-casi se me cae el móvil al escucharlo.-No es tan fuerte como el tuyo, pero te podrá ayudar.
- De...de acuerdo.
- Bien.-suena feliz.-Nos vemos el domingo entonces.
- ¿Debo llevar algo?
- No, pero invita al señorito James por mí.-resopla cansado.-Voy a dejar de hacer ejercicio por hoy y si se lo digo me gritara.
- Vale.-omito una carcajada.
- Por cierto, Sandra.-evita que termine la llamada.-Feliz cumpleaños.
- Gracias, señor Darby.
- ¿Cuántos cumples?
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Secretos envenenados
Acak¿Qué pasaría si un día te levantaras de la cama y descubrieras que no eres tan humana como te hacían creer? ¿Qué pasaría si tus profesoras de universidad no estuvieran tan lejos de parecerse a ti? Y sobretodo, ¿qué pasaría si ellas mismas afirmaran...