No soy ÉL -SEHO

Ten

A la mañana siguiente, a las nueve y cuarto, sonó el timbre de la puerta. Jisoo seguía llorando, como había hecho desde que se había despertado a las cinco de la madrugada.

JunMyeon estaba desesperado. Estaba muy cansado y podía sentir que iba a tener un monumental dolor de cabeza.

Mientras contestaba al timbre de la puerta, con los ojos hundidos por el cansancio, le dio unas palmaditas en la espalda a jisoo.

Cuando, al abrir la puerta, vio la impresionante figura de Oh SeHun, JunMyeon hizo todo lo que pudo para no llorar, debido a la emoción que lo invadió.

—¿Está mala? —preguntó SeHun, entrando en el piso.

—No sé. Ha estado así desde que se ha despertado. —explico JunMyeon tratando de calmar a la niña.

SeHun tomó a la niña y le tocó la frente para ver si tenía fiebre.

—Está caliente, pero no mucho. —dijo SeHun mirando a JunMyeon—. ¿Ha comido?

—No ha querido. Lo he intentado tres o cuatro veces, pero no quiere. —confeso JunMyeon tocándose la cara.

—Tal vez necesite que la vea un médico. —sugirió SeHun—. ¿A cuál la llevas normalmente?

JunMyeon no sabía adónde habría llevado SuHo a jisoo para sus revisiones mensuales, si era que lo había hecho.

—Yo... —JunMyeon se quedo pensando que cosa coherente decirle a SeHun para no enojarlo.

—La has llevado alguna vez al médico, ¿no? —SeHun le dirigió una mirada acusadora.

—Ah... —jadeo asustado al ver el enojo en los ojos de SeHun

—¡Es una niña pequeña! —le recriminó SeHun con furia—. Se supone que tiene que ser vacunada y examinada regularmente para ver si su crecimiento es normal.

—Está muy sana. —dijo JunMyeon, estremeciéndose al oír otro alarido de dolor de jisoo.

—¿Crees que realmente está sana? —preguntó SeHun mientras la pequeña seguía llorando.

—Quizá esté echando los dientes. —analizo JunMyeon preso del pánico.

—¿Cuánto tiempo tiene? ¿Cuatro meses? ¿No es un poco pronto para eso?

—¡No lo sé! Yo nunca... —JunMyeon se contuvo para no seguir hablando.

SeHun le devolvió la niña a JunMyeon cuando dejó de llorar.

JunMyeon admiró la maña que tenía SeHun con la niña. Había estado despierta durante horas tratando sin éxito de que la pequeña se calmara y en unos minutos SeHun lo había logrado.

—Ve y prepárate JunMyeon. —le dijo SeHun en un tono de voz bajo para no despertar a la niña, a la que tomó de nuevo en brazos—. Nunca se sabe cómo va a estar el tráfico a esta hora.

JunMyeon se fue a su habitación y analizó su ropa. Casi toda era o muy clásica o pasada de moda. Su trabajo en la biblioteca no requería llevar un atuendo muy moderno. Tenía muchos pantalones vaqueros, casi todos se los había dado SuHo cuando ya no le servían, así como camisetas que enseñaban más de lo debido.

Ya que se estaba haciendo pasar por su hermano gemelo, JunMyeon eligió entre las cosas que le había dado, aunque no le gustaba usar prendas que se pegaran tanto a su cuerpo exponiéndolo a la vista de todos.

Mientras se vestía, pensó en que todo lo de SeHun lo alteraba. No era sólo el hecho de que pensara que él era SuHo, sino que su forma de actuar lo intimidaba. No sabía cómo comportarse con un hombre tan fuerte y decidido. La realidad era que no tenía experiencia con los hombres.

Cuando regresó de arreglarse, vio a SeHun esperándolo con la niña en sus brazos. Estaba claro que adoraba a la hija de su hermano y haría cualquier cosa para protegerla, incluso casarse con un doncel que aborrecía.

—¿Estás preparado ya? —preguntó SeHun.

JunMyeon asintió con la cabeza, tomó la bolsita de jisoo y salió del piso detrás de SeHun.

Mientras se dirigían en el coche de SeHun hacia su despacho, JunMyeon se preguntó qué le habría dicho éste a su abogado sobre su repentino matrimonio. No sabía si debía comportarse como si todo fuera normal o si SeHun le habría contado la verdad.

Se preguntó qué pasaría si le decía la verdad a SeHun, sobre que él no era SuHo, la madre de jisoo y amante de Yifan. Seguramente de saberlo SeHun conseguiría la custodia, pero tal vez le dejara ver a su sobrina regularmente. JunMyeon se sentía indeciso y culpable.

Cuando llegaron, JunMyeon se colocó la mochila para llevar a jisoo en el pecho y SeHun le acercó a la pequeña, rozándole, involuntariamente, con su mano un pecho, ante lo que JunMyeon dio un respingo.

—Te recomendaría que en presencia de mi abogado no muestres tan abiertamente el desagrado que te causa que te toque. —le dijo SeHun con enfado—. Él cree que esto va a ser una boda normal y prefiero que siga creyéndolo.

—No es precisamente normal forzar a alguien a que se case contigo. —ataco JunMyeon.

—Tus sacrificios te serán más que compensados. —murmuro SeHun con arrogancia y reproche.

—¿No va a sospechar tu abogado del hecho de que yo venga aquí a firmar un acuerdo prematrimonial? —preguntó JunMyeon.

—Es muy corriente hacer acuerdos prematrimoniales hoy en día. Además de que tengo accionistas e inversores que proteger, por no hablar de mi padre. —recrimino SeHun—. No me voy a quedar parado y ver cómo un doncel de escasa moral hambriento de dinero como tú se lleva, si el matrimonio termina, la mitad de todo lo que mi padre y yo hemos conseguido con tanto esfuerzo.

Aunque JunMyeon sabía que todo aquello que estaba diciendo SeHun era razonable, no pudo evitar sentirse herido. Deseaba que SeHun pudiera ver cómo era realmente él, una persona que se preocupaba profundamente por su pequeña sobrina, hasta el punto de casarse con un completo extraño, pero si le contaba la verdad SeHun no entendería y alejaría con más razón a jisoo de su lado.

Mientras subían en el ascensor, JunMyeon sintió el calor que desprendía el cuerpo de SeHun, que estaba muy cerca de él. JunMyeon estaba echo un lío. Volvió a plantearse las dudas de qué pasaría si SeHun se enterara de la verdad, cosa que estaba casi seguro de que acabaría pasando así se lo cuente o no. 

**************

Espero les guste este cap 7v7r amo sus comentarios jaja