Twenty

298 57 16
                                    

A LA MAÑANA siguiente, SeHun observó cómo JunMyeon bajaba las escaleras vestido con el traje de novio. Al llegar a los últimos escalones, JunMyeon miró a SeHun de manera desafiante.

—Estás muy bonito. —le dijo SeHun, dirigiéndole una mirada irónica—. ¿Vas a algún sitio especial?

—No, simplemente me sentía con ganas de arreglarme. —contestó JunMyeon con igual ironía.

SeHun pensó que JunMyeon estaba totalmente sensacional, justo como debería ir un novio de verdad, y se preguntó por qué JunMyeon se habría arreglado así.

Media hora después, JunMyeon estaba de pie junto a SeHun mientras la ceremonia se celebraba.

—señor Oh puede besar al novio. —anuncio el juez.

SeHun se volvió hacía JunMyeon, quién estaba hecho un manojo de nervios, SeHun lo observo detenidamente y lo tomo de las manos acercando su rostro al de JunMyeon.

—No creo... —el susurro de JunMyeon se cortó cuando SeHun acercó su boca a la suya.

JunMyeon hizo todo lo posible para no responder a aquel beso, pero le fue muy difícil, por no decir imposible, ignorar la calidez de los labios de SeHun.

Una vez SeHun hubo dejado de besarlo, JunMyeon pensó que, para bien o para mal, ya estaba casado con Oh SeHun.

Después de la ceremonia, sólo hubo una pequeña comida con algunos de los colegas de SeHun, tras la cual JunMyeon se cambió de ropa, poniéndose uno de los conjuntos de su hermano SuHo: un traje de seda.

Mirándose en el espejo, se pasó la lengua por los labios. No podía dejar de pensar en aquel beso y en cómo sería sentir la lengua de SeHun tratando de encontrar la suya.

Cuando terminó de arreglarse se dirigió al coche de SeHun, donde ya estaba jisoo.

SeHun condujo hasta su casa de Gangnam, sin pronunciar palabra durante el trayecto.

—Le he dado a Yuqui el resto del día libre. —dijo SeHun, por fin, cuando llegaron a la casa—. Hay comida preparada.

—Creo que jisoo necesita que le cambie los pañales y que le dé de comer. —dijo JunMyeon, inquieto ante la idea de estar con SeHun, en aquella casa, con la única compañía de jisoo.

—Tengo que hacer un par de llamadas. —dijo SeHun—. Dime si necesitas que te eche una mano en algo. Estaré en mi estudio.

Un rato después, mientras JunMyeon estaba todavía dando de comer a su sobrina, SeHun entró en la cocina. Se había cambiado de ropa y estaba irresistible.

—¿Quieres que continúe yo para que así te puedas cambiar de ropa antes de cenar? —ofreció SeHun.

—No, ya casi hemos acabado. —dijo JunMyeon—. De todas maneras, no creo que quiera más.

—Parece cansado. —observó SeHun mientras jisoo se frotaba los ojos.

—Sí un poco. —dijo JunMyeon bajando la miraba para evitar la de SeHun.

—JunMyeon yo...

—Si no te importa, creo que no voy a cenar. —dijo JunMyeon interrumpiéndolo.

SeHun lo tomó la mano y JunMyeon no tuvo más remedio que mirarlo.

—Aunque decidas no comer, tengo cosas que hablar contigo. —susurro SeHun.

—¿De ... qué clase de cosas? —pregunto JunMyeon.

—Normas que hay que establecer, esa clase de cosas. No quiero que haya malentendidos. —aclaró SeHun.

—No sé qué quieres decir con eso. —susurro JunMyeon confundido.

—¿No lo sabes? —cuestiono SeHun.

—No. —admitió JunMyeon con voz inquieta.

—El vivir en la misma casa va a significar que, como es normal, tengamos un cierto grado de intimidad. No querría que te llevaras una impresión equivocada. —aclaro SeHun con nerviosismo.

— ¿Exactamente a quién le estás recordando los términos de nuestro acuerdo, a ti o a mí? —preguntó JunMyeon con sarcasmo.

—Por lo que me dijo mi hermano, parece ser que tú no siempre respetas las reglas del juego. Sería bueno que las recordaras. —contestó SeHun, tratando de serenarse.

—Pues hablando de romper las reglas, creo que tu beso fue un poco inapropiado para la ceremonia. —dijo resueltamente JunMyeon cruzándose de brazos.

—Habrá ocasiones en que tengamos que guardar las apariencias. —se defendió SeHun rápidamente.

—¿Qué quieres decir? —preguntó JunMyeon arqueando la ceja.

—A veces, tendremos que actuar, y tú, como mi esposo, tendrás que comportarte de un determinado modo respecto a mí. —explico SeHun tragando saliva sutilmente para disimular su excitación.

—¿Quieres decir que te tendré que adular? —JunMyeon lo miró indignado.

—Yo no lo diría exactamente así. —razono SeHun.

—¿Cómo lo dirías entonces? —inquirió JunMyeon con frialdad.

—Todo lo que pido es que muestres un poco de madurez cuando estemos con más gente. —pidió SeHun buscando algo en que pensar para calmarse.

—Haré lo que pueda, pero no te prometo nada. —dijo JunMyeon con rudeza.

—Bien, mientras que los dos sepamos a qué atenernos. —reflexiono SeHun.

Después de decir eso, SeHun se marchó y JunMyeon observó a su sobrina, que lo miraba con sus brillantes ojos oscuros.

—Idiota. —dijo JunMyeon tomando a la niña en sus brazos—. ¿Quién lo entiende? Tal vez debería intentarlo. —pensó mientras abrazaba a jisoo—. Parece que a ti te funciona. Tú sólo tienes que mirarlo y se derrite. 

*********

*********

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
No soy ÉL -SEHODonde viven las historias. Descúbrelo ahora