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El trabajo ha sido genial estas últimas semanas, y por genial, quiero decir que no he visto a Min Yoongi. La gente de mi piso es educada. Todavía no tengo respuesta de la recepcionista, pero no me doy por vencida. Ha sido fácil trabajar aquí, me divierto y a todos parece gustarles mi trabajo también. Eso es hasta que Addy me llama antes de comenzar mi día.

Tomo la llamada con el ceño fruncido ya que no es común que ella se comunique conmigo a esta hora.

- Hola, Kimi.

- Oye, Addy. ¿Pasó algo?

- Oh no. No, gracias a Dios. Necesitan ayuda en el piso del estudio, y no tengo a nadie disponible hoy. ¿Te importaría ir?

Pregunta extraña Addy. Desde que llegué, he estado ayudando a los productores, nunca me quejé, ¡es mi trabajo!

- Es Yoongi, ¿no?

Sé que mi tono no fue el más agradable, ya que las palabras llenas de desdén salieron de mi boca. Pero no puedo evitarlo. Él solo hace que mi sangre hierva. Maldición. Estoy pensando en él otra vez.

- Sí, necesita ayuda con algo para el álbum de Jungkook.

Parece temerosa de mi reacción. No he visto a Yoongi, pero sé que habló con Addy sobre mí. Sin embargo, soy una mujer adulta profesional. Puedo hacer esto.

- Lo haré. ¿Cuándo es?

Addy exhala y me doy cuenta de que ha estado conteniendo la respiración.

- Ahora.

- Está bien, tan pronto como llegue, me dirigiré directamente a su estudio.

Cuelgo, estaciono mi auto y me dirijo primero a la cafetería. Definitivamente necesitaré cafeína si estoy trabajando con la persona más gruñona que he conocido hasta ahora. Decidí llevarle un café a Yoongi y Jungkook, tratando de ser amigable y todo. ¿Quizás Yoongi se queme la lengua mientras lo bebe?

Una sonrisa aparece en mi rostro al pensar en ello mientras me abro paso a través de las puertas del edificio.

- Buenos días.

Aun así, sin respuesta de la recepcionista, camino hacia el ascensor. Este maldito ascensor me metió en este lío en primer lugar. Presionando el botón de los estudios, respiro hondo y me preparo para lo que está por venir. Se ha estado quejando de mí toda la semana con Addy, no de mi trabajo. No puede quejarse de eso. No, solo le dijo que no era una persona agradable de tener cerca, afirmando que tengo un temperamento terrible. Bueno, yo sí, pero él no me conoce lo suficiente como para decir eso.

Empujo la puerta de cristal y camino hacia el estrecho pasillo hasta llegar a su estudio. El letrero en la puerta dice "Genius lab". Agh, es tan arrogante. Por lo general, encuentro atractiva la arrogancia, pero no en él. Llamo a la puerta y espero una respuesta para decir que está bien entrar.

- Adelante.

No es la voz ceceante gruñona la que habla primero, así que empujo la puerta lo suficiente para ver quién ya está adentro. En el momento en que lo intento, alguien choca contra mí, derramando la mitad del café entre nosotros y el suelo.

- Mierda.

Oh no. Oh, no, no, no, no, no.

Por supuesto. Obviamente, con todas las personas del mundo, con quien me toparía sosteniendo 3 cafés calientes sería Min Yoongi. La expresión de su rostro casi me congela la sangre. Está enojado. Si no le agradaba antes, seguro que no le agradare ahora.

- ¿No puedes ver por dónde caminas?

Sí, está enojado. Yoongi se da la vuelta y se dirige a su escritorio, agarra algunos pañuelos y trata de secar las manchas de café en su camiseta gris.

Arrogante - Yoongi ±¹⁸  ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora