25

119 19 240
                                    

☠☠☠☠

¿Puedo saber por qué desperdicias tu día libre en atravesar la mitad del mundo para ver al hijo malcriado de tu jefe? — Preguntó Tom luego de que la mesera dejara sus órdenes, Maddie soltó una risa y Jane rodó los ojos, ya se le comenzaban a pegar las costumbres de los hombres Wesley.

Por qué, aunque quieras ir por la vida como el chico malo que no necesita de nadie... sigues siendo un adolescente normal que necesita ver a su familia... o al menos salir un rato de ese internado, pero si te molesta nos vamos. — Dijo la mujer en un tono de amenaza y Tom solo negó con la cabeza riendo.

Además, las cenas de aniversario ya se estaban volviendo algo rutinarias. — Confesó Maddie antes de darle un trago a su malteada de frutilla, Jane la observó con una expresión ofendida y la mujer solo soltó una melodiosa risa.

¿Están pasando su aniversario conmigo? Eso es triste. — Dijo el chico y ambas negaron con la cabeza riendo.

Tom soltó una risa ante sus reacciones y observó a ambas mujeres, parecía difícil que dos personas tan diferentes a simple vista pudieran complementarse tan bien, para Tom si le pedían definir a cada una con una estación diría que Maddie era primavera, con sus colores cálidos y esperanzadores, mientras que Jane era el invierno, con sus colores fríos y serios, el tipo de persona con el que no hay que meterse, pensándolo bien, ya entendía porque le caía tan bien la nueva secretaria de su padre.

— Jane... ¿puedo preguntarte algo sin que se lo digas a papá? — La mujer dudó por unos momentos, pero luego asintió con la cabeza. — ¿Qué sabes acerca de la boda de... mamá? — La expresión alegre de Maddie desapareció al escuchar la pregunta el chico, estaba al tanto de la situación de Tom con su madre y que está estaba por casarse y en la dulce espera de un nuevo hijo.

Jane soltó un suspiro pensando antes de contestar, pero antes de que pudiera decir alguna palabra su teléfono comenzó a sonar, era una llamada de Federico.

Si me disculpan por un momento. — Dijo antes de caminar hacia el baño para hablar con su jefe.

Sé que es pregunta de tía entrometida... ¿pero tienes novia, Tom? — Preguntó Maddie con una sonrisa amable, intentando distraer la atención del tema de su madre.

Tom asintió con la cabeza mientras pasaba una papa frita por sobre el montón de kétchup a un lado de su plato, todavía pensando en como Jane había sido salvada por la campana.

Si, Katie... es mas creo que debería llamarla. — Se dijo a si mismo mientras tanteaba los bolsillos de su chaqueta, dándose cuenta de que había dejado el teléfono en Charleston, últimamente se estaba acostumbrando a dejar su teléfono en cualquier lado, aunque no le molestaba alejarse de ese aparato por un rato. — Supongo que la llamaré cuando llegue... como sea, estamos juntos hace un par de meses, recién salimos de una especie de crisis, pero ya estamos bien. —

Me alegro mucho, a veces los amores adolescentes son complicados. —

Ugh, dímelo a mí. — Dijo Tom y ambos soltaron una risa, al mismo tiempo Jane volvió a su asiento en la mesa.

Tu padre llamó para preguntar como estabas, estaba molesto porque no le respondiste las llamadas y le dije que estás en todo tu derecho. — Jane decidió omitir la parte de la llamada donde Federico le advertía acerca de no revelar ni un solo detalle acerca de la madre de Tom, al parecer Federico había leído la mente de su hijo a la distancia y había evitado un potencial desastre.

Wow... nunca conocí a una asistente que le hablara así a mi padre. —

Bueno tu padre sabe que necesita un cable a tierra, y aparentemente yo soy su cable a tierra y por eso no me ha despedido. — Soltó Jane sonriendo antes de robar una papa frita del plato de Maddie. — Hombres como tú padre necesitan que alguien que los baje de su pedestal de vez en cuando. —

Good Boys » Matty's VersionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora