*NARRADOR OMNISCIENTE*
Beatrice y su padre se encontraban en la sala de estar con solo la luz de una lampara como iluminación del lugar.
Raphael repasaba una y otra vez los diarios de su madre, memorizandose el método que habia estado leyendo por horas para no saltarse ni un paso de lo que planeaba hacer con su hija.
- ¿Estás seguro de que funcionará? - preguntó Bea dudosa.
- Nunca lo sabremos si no lo intentamos. - respondió su padre dandole un sorbo a taza llena de café en su mano.
Luego de unos segundos su padre suelta una exclamación de victoria, aunque trata de callarlo al instante para no despertar a los demás.
- Bien, ya se como hacerlo. - suelta con una sonrisa.
Bea lo mira espectante, esperando a que le explique.
- Tienes que entrar en mi mente1. - suelta su padre y Beatrice se queda petrificada en su lugar.
La castaña ceniza se levanto del sofa de golpe y negó. Ella no haria eso.
- Ni lo sueñes.
- Bea, tienes que hacerlo. - pidió su padre- Es la unica forma. Si desarrollas un poco más tus habilidades podras empezar a controlarlas. Tienes que entrar en mi mente, has lo que tengas que hacer, busca algún recuerdo, un pensamiento... Lo que sea, pero hazlo.
- ¿Y si no puedo controlarlo? ¿Y si te hago daño? - murmuró Beatrice- No puedo... No puedo hacerlo.
Raphael tomo la cara de su hija entre sus manos para que lo mirara a los ojos.
- Puedes hacerlo. - determinó.
- No puedo...
- Confia en ti. - la interrumpio su padre- La única persona en la que puedes confiar plenamente siempre seras tu, hija. Confia en ti.
Beatrice soltó un pesado suspiro y cerró sus ojos, mentalizandose en lograr entrar a la mente de su progenitor.
Y lo hizo.
Al principio todo fue muy confuso para ella, varios recuerdos, pensamientos y emociones la atormentaron enseguida, logrando dejarla sin respiracion por unos segundos.
Luchó contra ella misma, logrando asi enfocar todo con un poco más de claridad. La mente de su padre resultó ser un sitio completamente negro con miles de puertas a su alrededor. Bea caminó hasta una de ellas y dudó unos segundos antes de abrirla.
Un recuerdo llego a ella de golpe. Eran sus padres cenando junto a otras personas. La familia Argent. Y en el sofa de la sala en la que se encontrabas habian dos niñas, una castaña y la otra castaña ceniza y dormian placidamente sobre el sofa. En el suelo, jugando con algunos bloques, se encontraba tambien un niño castaño.
Beatrice no tardó en deducir que eran ella, su hermano y su mejor amiga de toda la vida, Allison Argent.
Bea salió del recuerdo y fue abriendo cada una de las puertas que encontraba a su paso hasta que llego a una que especialmente logró captar su atencion. Era una puerta negra y estaba mucho más alejada de las demás. La castaña ceniza no dudó en abrir esa puerta con la curiosidad carcomiendole.
Pero la imagen tras la puerta era totalmente confusa.
El recuerdo era muy borroso. Mostraba a tres personas en una habitación y una de ellas cargaba a una bebe. A duras penas Bea pudo vizualizar a sus padres, quienes estaban discutiendo, pero le fue imposible lograr ver la cara borrosa de la mujer rubia que sostenia a la bebe. No lograba escuchar nada, solo murmullos sin sentido.
Y de pronto, todo comenzó a desmoronarse.
La imagen fue rota en mil pedazos que se desvanecieron y todo a su alrededor empezó a temblar mientras Beatrice rapidamente salia de esa puerta. Pudo ver como todas las demás puertas se rompian a cada paso que ella daba y la desesperacion comenzó a embargarla rapidamente al igual que el dolor cuando trató de salir de la mente de su padre y no lo lograba.
Todo a su alrededor se estaba cayendo a pedazos y el fuerte dolor la estaba carcomiendo.
Beatrice soltó un desgarrador grito ante el insoportable dolor y fue en eso cuando al volver a abrir los ojos, pudo ver que ya no estaba en el espaciado negro. Ahora volvía a estar en la sala de estar.
Pero ya nada era igual que antes y eso podia sentirse en el ambiente. Ahora ya no solo estaban su padre y ella en la sala, ahora tambien estaban Rosalie y sus dos hermanos mirandola con horror y ella no podia entender que era lo que había pasado hasta que cuando volvió a mirar a su padre, este ya no estaba sentado frente a ella.
El ahora yacia muerto en el suelo.
ESTÁS LEYENDO
𝐓𝐄𝐋𝐄𝐏𝐀𝐓𝐇 𖦹 Tᴇᴇɴ ᴡᴏʟғ
Fanfic𝐓𝐄𝐋𝐄𝐏𝐀𝐓𝐇 ᯾ «𝘌𝘭𝘭𝘢 𝘩𝘶𝘪𝘢 𝘥𝘦 𝘴𝘪 𝘮𝘪𝘴𝘮𝘢 𝘴𝘪𝘯 𝘢𝘯𝘵𝘦𝘴 𝘩𝘢𝘣𝘦𝘳𝘴𝘦 𝘱𝘰𝘥𝘪𝘥𝘰 𝘤𝘰𝘯𝘰𝘤𝘦𝘳» _______________________________________ Beatrice Leblanc llega a Beacon Hills de la mano de su maestro, Gerard Argent, para esca...