¿Más Que Amigos? | #1

Capítulo 46

— ¿Qué es todo esto? —pregunte a Dawn, cuando llegamos a la entrada del teatro.

— Una huelga para que todos tengamos los mismos derechos. —contestó orgullosa.

— Suena interesante, ¿pero por qué es la huelga?

— Porque varios no tien los recursos para comprar o participar en distantes actividades, por lo que tratamos de convencer a la jefa de que todos tengamos los mismos derechos.

— Es una buena razón, buena suerte.

— Gracias.

Sonreí una última ves antes de entrar al teatro, busque a Kristy con la mirada, y al encontrarla fui a su lado.

— ¿Ya empezó?

— No aún no, pero ya casi.

De la nada, todas las luces se apagaron y se abrió el mini telón, dando inicio a la obra.

Minutos más tarde, los gritos de afuera aumentaron y la gente empezó a irse.

— ¡No esperen! —grito Mary Anne, más nadie le hizo caso.

Todos salimos a ver que pasaba, los gritos aumentaron mucho más cuando la camioneta de la jefa llegó.

Freno el auto, y bajó de este enojada. Sacó una bocina de no se donde y la hizo sonar. Todos de inmediato de callaron, hasta los consejeros.

— ¡Se acabó! Consejeros, lleven a su campistas a sus cabañas, ¡ahora! —nadie se movió. — Oh pasaran el resto del verano en estas, y cerraré el campamento.

Las chicas y yo nos volteamos a ver asustadas.

¿Cancelar el campamento? Eso es mucho.

— ¡3 semanas sin salir de sus cabañas! ¿Entienden lo que es eso? —ahora si las personas comenzaron a irse. — Shafer, Kishi, a mi oficina, ahora.

Las recién nombradas bajaron de donde estaban, para se acercarse a la jefa.

— ¿Y qué? ¿Nos enviará a casa? —pregunto Claudia, con algo de burla.

— No, las enviaré a casa. Siganme.

— Carajo. —susurre. — ¿Ahora qué?

— No podemos permitirlo, iré con ella. Si envía a Dawn y a Claudia, que me envíe también.

— Y a mí, muero por ver a Sam. —comenté.

— A mi también, ya hize todo lo que tenía por hacer en el campamento. —dijo Stacey, mirando a su amiga. — Y me gustaría dormir en mi cama.

Las cuatro caminamos por donde se habían ido as chicas, hasta que Mary Anne nos interrumpió.

— ¡Esperen! Yo también voy.

— ¿Y la obra? —pregunte.

— Ya esta arruinada, haremos que fue un ensayo con vestuario. Además no puedo apoyar a mis amigas. —las cuatro sonreímos, comenzamos a caminar rumbo a la oficina, hasta que Logan nos detuvo.

— ¡Mary Anne espera! —las cuatro volteamos.

— Lo siento Logan, tengo que hacer esto.

— Lo sé, eres muy valiente, pero te perderás nuestro beso.

Levante las cejas sorprendida, tenía razón cuando dije que Logan gustaba de ella.

— No, para nada. —Mary Anne se acercó a él, lo tomó de los hombros y lo atrajo hacia ella. Tocó levemente sus labios, y se alejo con una sonrisa.