Wings (Finalizada)

Fourty-Six

Juro por dios que quiero matarlo.

Me imaginé de todo en una cita o pre-cita, menos terminar en una misteriosa boda. Observo el agarre que Jungkook ejerce sobre mi mano con fuerzas, esta sentado a mi lado con su típica risita de "soy irresistible". Aunque eso no me incomodaba tanto como las miradas del resto de las personas invitadas ¿Y como no? si soy como un pajarito indefenso y desorientado en una jaula de leones. Soy la única anormal aquí, y razón tienen en una parte de verme feo si vine como si en vez de boda fuera mi cumpleaños.

La gente aquí viste muy, pero muy elegante, incluyendo a Jungkook por supuesto.

He ido a bodas, pero esta tiene un toque más sofisticado, puedo decir que se ve como si se fuera a casar alguien de la realeza y no dos personas comunes y corrientes que de paso no sé ni quiénes son.

La locación está completamente decorada con flores blancas y azules, y no hay un rincón en el sitio donde no hayan flores, seguramente eso costó una millonada, y pensar que a eso hay que sumarle la comida, las mesas, las copas de cristal, los músicos, es que si sigo y hago un cálculo me dolería en el alma .

¿A quien se le ocurre gastar tanto dinero en una boda?.

En fin, cosas de ricos.

Jungkook sigue con sus ojos clavados sobre los mios haciéndose el inocente el muy idiota, hago un intento de soltarlo, pero el muy hábil ejerce más fuerza.

— Deja de mirarme.— Le digo entre dientes.— Quiero salir de aquí.

El pelinegro se acerca muy peligrosamente y roza sus labios con el lóbulo de mi oreja.

— Solo espera un poco más princesa.

— No.— Espeto molesta—  Es que todos aquí me están mirando como retardada por tu culpa.

— Solo son unos minutos, los novios ya están por salir.

Bufo mirando hacia otra parte. A mi lado hay una doña como de setenta años con un Chihuahua metido en una bolsa de Louis Vuitton. ¡Ja!, ¡Sabía que estaba en zona de ricos!. También compartíamos la mesa con Jimin quien llegó rato después de nosostros, viste completamente de blanco, y por último frente a nosotras el sujeto de apellido Min, es que hasta incluso el viste muy bien.

— Observa al interior del jardín a tu lado izquierdo princesa— Propone Jungkook bajito

Veo hacia donde me señalaba, y no lo pude creer. Incluso tengo que restregarme los ojos para ver si no se trata de un espejismo o algo producto de mi imaginación. Pero no, efectivamente la chica que luce un vestido con estampado de flores azules mientras arma ramilletes de flores junto a otras dos chicas es Haneul.

Observo a Jungkook sin poder creerlo

— Es... Haneul.

El pelinegro asiente.

— Te dije que te tenía una sorpresa Princesa.

Vuelvo a mirar hacia el interior del jardín, hany no me nota y parece como si estuviese conectada solamente con esas benditas flores. Solté la mano de Jungkook para ir hacia ella, sin embargo el muy idiota vuelve a sujetarme. Lo miro sin entender, entonces el lugar se llena de aplausos, y con eso el inicio de la marcha nupcial.

— Damas y caballeros demos la bienvenida a la nueva pareja Jung— Exclama el maestro de ceremonia con el mejor de los sentimientos.

Reparo en la pareja que sale tomada de las manos por toda la pasarela adornada de flores, y juro que en este momento deseo tener un arma y matarlo. Okay no, pero al menos una afeitadora y dejar calvo a Hoseok. ¡Se va a casar! ¡Y no con mi amiga!. Aunque claro está, que aunque está tomando de la mano a esa flacucha de piel pálida su cara parece la de un mismísimo funeral.