Wings (Finalizada)

Two

Me dije a mi misma que me iba a esforzar y eso estaba haciendo. Desde que el profesor Seokjin se había encargado de poner en duda mi capacidad intelectual no había hecho otra cosas más que estudiar y prepararme para ser la mejor y no perder la beca, yo poseo como una especie de espíritu competitivo, además debo admitir que la materia del profesor Seokjin es una de las más dificiles, pero no imposibles.

Desde muy pequeña mi sueño es poder aprender el idioma más importante y demandante del mundo, el inglés no es fácil, pero tampoco imposible de aprender. Aunque estoy segura que era el profesor Seokjin me esta jugando una mala pasada.

Es la primera vez que me reprueba inglés en los dos años de carrera que llevo.

— Deberías de tomarte un descanso Seongji. — Suspiré ante el pedido de la persona que justamente apartó unos libros y colocó un tazón de cereal a mi lado.

— Si la leche está tibia será mejor que te lo tragues tu— Señalé mirando a mi mejor amiga con burla.

Kim Haneul era prácticamente la única amiga en quien podía confiar plenamente, también es mi compañera de departamento. Cuando cumplí los dieciocho años y una vez logré mi admisión en la universidad decidi independizarme ignorando las negativas y chantajes. Al principio vivía sola y no era sencillo, luego de un tiempo mi soledad afectó mucho en mi vida personal, no tenía amigos ni nadie con quién hablar de cosas así fuesen sin sentido. Un día decidí entrar a un grupo por internet de chicas con los mismos problemas de autoestima que yo tenía y allí conocí a Haneul, ella es de Busán, una provincia alejada de la ciudad.

Haneul era con la que mas hablaba en ese grupo porque desde un principio me pareció la más madura. Efectivamente lo era, Haneul me lleva algunos años de diferencia, pero a pesar de eso no le negué mi ayuda cuando decidió venirse a terminar sus estudios aquí en la ciudad. Al principio me dió miedo cuando la conocí porque no sabía mucho de ella realmente, pero tuve suerte cuando con el tiempo fue convirtiéndose en la hermana mayor que siempre necesité.

Hoy en dia llevámos dos años de amistad, Haneul tiene un espíritu de hermandad increíble porque nadie a dado mejores consejos y cuidados que ella.

Mis padres por supuesto que no saben sobre mi mejor amiga porque si se enteran que una extraña vive en mi casa sin dudas me matan y a ella la mandan a la cárcel por mucho que les explique que Haneul es un ángel.

— El cereal con leche tibia es lo mejor— Dice como si fuese lo más delicado del mundo metiendo el bol con leche al microondas

Rodé los ojos y seguí copiando en mi cuaderno los apuntes.

— Error, estudiar es lo mejor del mundo— Corregí. El cuaderno que tenia sobre la mesa desapareció de mi campo de visión.

Observo como Haneul lo coloca sobre uno de los estantes de la cocina lo suficientemente alejado para que yo no pueda alcanzarlo.

— No exageres Seongji, debes descansar. Siento que te presionas mucho y mereces vivir como una joven de tu edad— La miré. Estaba cruzada de brazos  mientras su tazón de cereal daba vueltas en el microondas, su cabello largo caía por su espalda, aún llevaba el uniforme de su trabajo puesto.

— Eso lo puedo hacer cuando termine mis estudios, por ahora no.

La chica suspiró, el sonido que daba por finalizado el recalentamiento sonó, Haneul sacó el tazón de cereal del microondas reparando de nuevo en mí, ahora luce más seria, Han tiene veintiséis años, pero su aspecto y facciones son como los de una niña, los años no le juegan en lo absoluto.

— No opino lo mismo— Dice — Puedes vivir y disfrutar mientras estudias, para todo hay tiempo, solo no te cierres Seongji. Quiero mejor para ti.

— Lo sé. — Respondo — Mamá me llamó hoy en la mañana. — Cambio de tema. Han abrió sus ojos y se acercó tomando asiento a mi lado con su tazón de cereal — Me dijo que pagó una mensualidad en un gimnasio para que pudiera asistir.

Mi amiga mastico apresurada con su rostro fruncido

— Sinceramente no entiendo a tu mamá y ese empeño en que seas una de esas chicas falsas que tienen que ser perfectas— Me miró fijamente— No lo hagas si no quieres Seongji, eso lo único que hace es aumentar más tu inseguridad.

Ella tiene toda la razón, pero parte de lo que me dijo de vivir mi vida como una joven de mi edad me lo había dicho mi madre también. Debo vivir y hacer cosas que hacen las chicas de mi edad.

—¿Piensas ir?.

La pregunta de mi amiga me saca de mis pensamientos. Yo me encogi de hombros.

— Tal vez...

Haneul no dijo más y siguió comiendo su cereal en silencio, ella era así, no le gustaba ser tan presionante con los temas que tienen que ver con mi familia, además sé que está cansada, lo puedo ver en sus ojos apagados, últimamente a estado llegando muy tarde de su trabajo.

Un suspiro salió de sus labios y la miré preocupada.

— ¿Estás bien? — Me animé a preguntarle. Ella hizo una mueca

— ¿Recuerdas que te conté que hay alguien que me estaba invitando a salir? — Comenta debutativa.

Cerré mi guía de inglés enfocándome en ella, a pesar de sus duda puedo ver  un brillo en sus ojos  que hace mucho no veía.

— Si, pero me dijiste que no estabas segura por todas las experiencias que haz vivido— Respondo. Ella sonríe a medias a pesar de su cansancio.

— Hoy conversamos y creo que es un chico genial y quiere llegar a algo serio. Me dijo que íbamos a ir despacio, ¿Tu que opinas?.

Sonreí, me entusiasma un poco su felicidad, Haneul a vivido mucho y eso incluye sus malas experiencias en el amor, ella es muy linda y merece encontrar a alguien que la valore de verdad.

— Opino que es lo mejor, pueden ir despacio como él dice. Sé que esta vez te irá bien.— Respondí con sinceridad.

Haneul se estiró sorprendiéndome con un abrazo, ella es así de impulsivamente cariñosa.

— Gracias mi pequeña amiga. — Al apartarse me sonríe  —Tu también mereces que te vaya bien y me refiero al Amor— Movió sus cejas juguetonamente, sus ojos repararon en mi muñeca, justamente donde tengo la pulsera — Que extraño, nunca te la había visto.

— Es Nueva, me la dio una anciana con la excusa más estúpida del mundo.

— ¿Ah sí? — Haneul pareció interesarse en el tema— Cuéntame.

Tome aire recordando ese día, recuerdo haber regresado a la famosa feria en búsqueda de la señora, pero no volví a encontrarla, en su lugar instalaron un puesto de dulces. Fue como si a esa mujer se la hubiese tragado la tierra.

— Me dijo que esta pulsera en mi conexión con mi hilo rojo, ¿Puedes creerlo? — Me burle. Pero Haneul no me siguió el juego— No creerás que es cierto, ¿Verdad?.

— ¿Porque no?— Inquiere un tanto ofendida— Puede ser real Seongji, siempre quise que me sucediera algo a así.

Una idea cruzó por mi cabeza y sonreí  de manera macabra. Haneul negó enseguida.

— No Seongji, no pienso tomar tu lugar, no puedes romper algo que ya está escrito— Advirtió.

— No seas ridícula — Espete. — Esas cosas no son reales.

Haneul entecerró los ojos.

— Si no son reales ¿Porque tienes la pulsera puesta?.

— Me gusta, es muy original — Respondí mirando el accesorio en mi mano totalmente convencida de que estas cosas no existen más que en los libros.

Es raro la raíz y el origen de todo esto, pero admito que me divierte. Al final de cuentas puede que considere deshacerme de esta pulsera, pero por ahora decido llevarla conmigo un tiempo a ver si al menos me da algo de suerte.

Mañana Hope Family LGO 😘