NCT Dream

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Renjun
"Muse"

¡TW! Asesinato, sangre. Leer solo si se sienten
cómodos con el tema, de otra forma, no lo lean.

 Leer solo si se sientencómodos con el tema, de otra forma, no lo lean

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Lo de ellos era suave y tierno, se amaban como cualquier pareja. Y, como cualquier pareja, tenían sus discusiones, pero no era nada que fuera imposible de solucionar. Ella usaba su amor como inspiración para escribir canciones, y él la usaba como su musa.

―Ese chico es una red flag andante, Sun― le dijo su amiga, mientras salían de la sala. Sun la miró, seria.
―Claro que no― negó―. No lo es, lo sabes.
―Sí lo es, y no es la primera vez que lo decimos. Te manipula y siempre quiere que estés con él. Aun no entiendo cómo no te ha convencido de que te cambies a artes con él.

Sun puso los ojos en blanco, molesta por las palabras de su amiga. Ellas no tenían ni idea de lo que pasaba detrás de las puertas de su apartamento. Solo lo que ella les contaba. Renjun era inseguro, Sun lo sabía, pero ella lo hacía sentir seguro, así no pensaba de más las cosas. Aun así, Jun no la manipulaba. O eso pensaba ella, porque nunca creyó que él la manipulara de ningún modo.

Al llegar a casa, entró y vio a Jun pintando, con las hojas en la mesa. Cerró la puerta y se acercó, en silencio. Renjun tenía una foto de ella en la esquina del dibujo, que usaba como modelo.

―Veo que sigues con esa pintura― dijo, llamando su atención. Él la miró.
―Debo terminarla, no quiero entregarla tarde― contestó, sonriendo. Tenía una mancha de pintura roja en la mejilla.
―Tienes la mejilla sucia.
―Sí, lo sé, pero me olvidé de limpiarla. ¿Cómo te fue?
―Bien. Iré a cambiarme y vengo contigo.
―Claro.

Sun fue a su habitación, mientras se soltaba el cabello. Jun continuó en lo suyo, pintando el cuadro, sin desconcentrarse. Escuchaba a Sun en la habitación, lo que lo hacía sentir seguro.

Mientras Sun escribía una nueva canción, Renjun dibujaba el paisaje del parque, en silencio, con una melodía ligera recorriendo cada rincón de sus manos. La melodía era una que Sun había compuesto, y que lo relajaba. Sun era la melodía, porque había puesto cada pedacito de ella en crearla. La miró, en silencio, y vio que sonreía.

―¿Qué te hace sonreír tanto?― preguntó, dejando la carbonilla.
―Estaba recordando un momento en la escuela, es todo― negó con la cabeza―. ¿Puedo ver tu dibujo?
―Sí. Déjame ver tu canción.

Sun asintió e intercambiaron los papeles. Sun observó el dibujo, hecho en escalas grises, mientras Jun leía la canción, en silencio. Una sonrisa apareció en sus labios, en esos bonitos labios que a Sun tanto le gustaban. La canción era linda, su letra era animada y habría sido perfecta para un día de verano.


Pero, por más perfecta que hubiera sido su relación, hubo un punto de quiebre, en el que Renjun no pudo soportar más el cariño de Sunhee, y en el que Sunhee se cansó de estar parada frente a él, posando como si no fuera nada más que un cuerpo y una cara bonita. Así que, sin avisarle, decidió salir al club con sus amigas, donde estarían bailando y bebiendo, sin ningún problema llamado "Huang Renjun".

―Vamos, Sun, bésalo― dijo una de sus amigas―. De cualquier manera, nunca se enterará.

Todas se rieron, Sun incluida. Se acercó a uno de sus compañeros y, antes de arrepentirse, lo besó en los labios, cerrando los ojos, imaginando que era su Renjun, para no sentirse más mal de lo que ya se había estado sintiendo.
A diferencia de lo que dijo su amiga, Renjun sí se enteró. Estaba en el mismo lugar, viendo a su novia besar a otro, de la misma manera que la besaba a él, con un vaso en la mano. No había ido porque le gustara el lugar. Había ido porque la había escuchado hablar con sus amigas. Dejó su bebida y salió, con la sangre hirviendo en sus venas. ¿Cómo se atrevía? Después de todo lo que hizo por ella... Renunció a sus sueños de ser un artista conocido, renunció a su familia solo porque no la querían. Y ella le agradecía de ese modo. Manejó hacia su apartamento, sin pensar en otra cosa que no fuera lo que hacía Sun cuando salía.

↞↠

Renjun observa sus manos, manchadas con rojo. Mira el suelo, de donde viene el color. Su pecho sube y baja al ritmo de su respiración, agitado. Sabe que no hay vuelta atrás después de lo que hizo, pero no le interesa. Aprieta los puños, aún más molesto. Ve que los ojos de Sun se mueven un poco y alcanza el objeto que está al lado de ella, agachándose a su lado.

―¿Qué ocurre?― susurra, moviendo el objeto entre sus manos―. Te lo dije, Sunhee, no mientas. Sé lo que hiciste cuando saliste con tus amigas, sé que seguiste viéndolo después del beso.

Sun suelta un gemido, mientras trata de moverse, pero Jun le agarra el brazo, provocándole un sollozo. No le importa cómo se siente, ella se lo buscó.

―No intentes gritar o escaparte― dice, pasando el objeto por su mejilla―. De cualquier manera, no hay forma de que lo hagas.

Sonríe, mientras los ojos de su bonita novia se llenan de lágrimas. Mueve la cabeza y baja el objeto a su cuello, apretando un poco.

―Ya lo dije: si no eres mía, no eres de nadie. Una pena que pensaras que no iba en serio.

Mueve la mano y el objeto corta su cuello, haciendo que la sangre salga. Renjun se para y deja el cuchillo al lado del cadáver de la que fue alguna vez su novia. Suspira y se limpia el rostro, en el que tiene una pequeña mancha roja. Luego, va a lavarse al baño, dejando al cadáver de su musa en la sala. Luego de lavarse a consciencia, levanta la vista, viéndose en el espejo.

―Ahora por el otro.


***


AAAAA me gusta lo que escribí, es la primera vez que escribo algo así, explícito(?)

Espero les guste.

Recuerden que TODO es simple ficción, NADA ES REAL. Porfis no vengan a atacarme después de leerlo, gracias.

𝕆ℕ𝔼 𝕊ℍ𝕆𝕋𝕊 (en curso)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora