Part. 3 Capitulo 8

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Los días seguían pasando y Spica no había podido volver a ver a Thomas, ya que su padre la habia dejado ayudarle en la búsqueda del chico Biers, aunque siempre que el descansaba la hacia descansar a ella también, es por eso que siempre que el mayor iba a la reservación Quileute ella lo acompañaba.

Ahora mismo se encontraba en su casa dándole de comer a su lechuza cuando escucho que alguien lanzaba piedras a su ventana eran las siete de la mañana, se supone que al medio día partirían a la reserva con su padre, por lo que no sabía quien se encontraba ahí.

Asomo su mirada sin abrirla, para encontrarse con Thomas de pie en su pateo trasero, con una sonrisa, ella abrió la ventana y lo miro.

-¿Qué haces aquí tan temprano?

-Solo quería pasar a saludarte, no nos hemos visto en toda la semana.

-He tenido mucho trabajo, lo siento-al estar en la ventana sintió una corriente de aire que la hizo temblar por lo que miro al chico el cual no llevaba nada con que cubriese-. ¿Te gustaría entrar?

El vampiro le dio una sonrisa de lado.

-¡¿No crees que correré más peligro si el sheriff del pueblo me encuentra en la habitación de su hija?!

-Podrías ocupar tu don de invisibilidad, además de que yo te invitaba a pasar a la sala, no a mi habitación.

-Solo muévete a un lado de tu ventana-Spica solo pensó que estaba loco, estaría usando su condición como vampiro para llegar a su recamara.

Ella hiso lo que le pidió y vio como entraba por la ventana sin hacer ruido, cosa que la asusto ¿Cuántas veces pudo haber entrado de esa manera mientras ella se encontraba dormida? luego descarto ese pensamiento al pensar que si el llegaba a entrar sus mascotas la alertarían.

Spica siguió dándole de comer a sus mascotas, trataba de hacer algo para que el inmortal no la viera sonrojarse ya que habia recordado demasiado tarde que se encontraba con su pijama dorado con rojo.

-Vengo a verte y me ignoras por tus mascotas-dijo un poco divertido el chico.

-Claro, ellas son mi prioridad-dijo un poco en broma y un en serio.

-Bueno solo vine a saludarte y preguntarte como has estado. Ya sabes cancelaste nuestra salida del martes y solo se por tu hermana que te encuentras ocupada-Spica lo miro divertida.

-Así que le preguntas a Bella ¿por mi?

-Claro, ¿por qué mas le hablaría?-dijo en broma.

Ambos se fueron acercando cada vez más.

-Tal vez porque tu hermano y ella salen, podría llegar hacer tu cuñada-el chico la miraba con una sonrisa divertida, ambos ya se encontraban solo a un paso de distancia del otro, distancia que el termino.

-Podría ser mi cuñada, pero no por las razones que crees-le dijo en un suave susurro al oído.

Estas acciones y el que se encontraran tan juntos lograron que Spica se sonrojara a mas no poder.

Ambos tenían que hablar y estaba más que claro, ambos escondían cosas al otro que eran de vital importancia; Pero ese no era el momento adecuado o eso creía el, según su hermanita Alice, decia que cuando el le dijera el secreto ella no se apartaría de él.

-¿Sabes Tommy?

-mhn...

-No se que me hiciste, pero se que desde que te conocí siento una gran paz en mi pecho siempre que estamos juntos. Me haces sentir sentimientos que creí que jamás volvería a sentir...

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