Capitulo 1

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Nueve y media de la mañana. Primer día de trabajo y no dejo de sudar ¡No puede ser!

Acabo de ser contratada para trabajar en "The Golden Hand" la agencia encargada en atención judicial. Su nombre es muy raro pero esta empresa está certificada y sin duda muy bien reconocida en varios países. He buscado por meses un trabajo prácticamente bien pagado (lo que no suele pasar en México) y que pueda aceptar mi perfil de primer empleo siendo menor de edad y gracias a los contactos de mi madre pude tener una pequeña oportunidad en esta empresa.

El gran "amigo" de mi madre, Marcial, es el gerente de la empresa y como es obvio no le fue difícil darme un lugar aquí. Su despacho está del lado izquierdo, la segunda puerta a la derecha según la recepcionista. Subo los últimos escalones y por fin llego ante ella. Cierro los ojos y respiro profundamente mientras acomodo mi cabello hacia atrás, a pesar de ser un favor el que me hacen tengo que dar una buena impresión.

Abro mis ojos y con suavidad golpeo tres veces la puerta. Casi en seguida escucho la voz de Marcial al otro lado de la puerta diciendo "Pase". Abro la puerta y allí esta, sentado detrás de su escritorio tecleando en su laptop.

Marcial se caracteriza por ser un hombre alto como de un metro ochenta de cabello oscuro y ojos cafés, no es guapo pero tiene lo suyo y según mi madre es muy trabajador, exigente y amigable.

Sin dejar de teclear en su computadora me mira de reojo y mueve su cabeza en señal de que entre. Entro y cierro la puerta detrás de mí con cuidado, dirigiéndome a las acogedoras sillas enfrente de su escritorio. Justo cuando me siento enfrente de él deja de teclear su computadora para enderezarse y verme de frente.

—Hola Vannia— me saluda.
—Hola Marcial.
—¿Cómo has estado?
—Bien gracias ¿y tú?
—Muy bien, trabajando como loco.

Me sonríe. Yo no sé qué hacer así que solo esbozo una pequeña sonrisa.

—Bien, tu madre me ha estado pidiendo que te de trabajo. Eres muy joven para trabajar aquí, lo sabes ¿no?
—Lo sé, por eso me sorprendió que me llamaras.
—Se que estas pasando por una etapa difícil, pero me gustaría que pudieras seguir estudiando y si te parece trabajar también.

Entrelaza sus largos dedos y los coloca sobre la mesa, esperando mi respuesta. Sinceramente yo pienso seguir estudiando, pero por ahora no, eso ya será después de un tiempo. Ahora lo que necesitamos es dinero.

—Si seguiré estudiando— contesto tranquilamente. —Después de un tiempo, por ahora solo me enfoco en un empleo, es lo que necesito ahora.
—Pero Vannia, tu educación es muy importante, así no llegarías a ningún lado. Los jóvenes de ahora creen que el estudio es aburrido y no ayuda en nada, además de ser muy largo el periodo de estudio.

—Eso me queda mas que claro Marcial y como bien lo mencionaste entiendes la situación que estamos pasando y no puedo darme el lujo de seguir estudiando mientras mi madre la está padeciendo, no me puedo dar ese lujo aún.
—Creo que cometes un error, tal vez si...
—Si deseas apoyarme con el trabajo...—lo interrumpo un poco más brusco de lo que pretendía. —estaré sumamente agradecida, de lo contrario es mejor que siga buscando.

Decidida comienzo a levantarme de la silla.

—De acuerdo. No hagas un alboroto Vannia. —dice poniendo sus ojos en blanco y alzando una mano indicando que me vuelva a sentar.
—Gracias—regreso a mi lugar sonriendo en mi interior.

Marcial hace su silla hacia atrás y empieza a buscar unos papeles en su cajón, saca un folder azul y lo coloca sobre el escritorio; me inclino un poco y puedo ver escrito a mano "Puestos y Empleados" Marcial abre el folder y comienza a buscar entre las hojas lo que fuera que quiera encontrar. Mientras tanto me dedicó a mirar el lugar. Es una habitación más grande de lo que imaginé, las paredes son de color beige detrás de él hay una enorme ventana de techo a piso donde se puede ver la ciudad en todo su esplendor. A mi lado derecho tiene un sillón café oscuro junto a la puerta de entrada, en el otro extremo de la puerta hay una pantalla plana de cincuenta pulgadas y justo al lado hay otra puerta de color café donde me imagino que es un baño; su escritorio es café oscuro y tiene una asombrosa laptop encima además de muchos papeles regados también. A mi lado izquierdo hay otra puerta y un pequeño letrero que dice "ARCHIVOS ". Para ser sincera no esta nada mal su oficina.

El sabor del PlacerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora