Casada Con La Bestia

Epílogo

Mi mundo ideal.
NIKOLAY

2 Meses después.

Ya mis tres debilidades tenía un añito de vida, ese año donde solo habíamos tenido felicidad, un hijo te cambia el mundo y creo que la mayoría de veces lo hace para bien como había sido para mí.

-¿Donde están las muñecas de papá? Dije jugando con mis bebes.

-PaApA paa- la única que caía siempre era mi pequeña Nadya, mis pequeñas eran una mezcla de muchos de nuestra familia, pero de carácter de carácter eran muy parecidas a mi.

-¡Maaa daa aa!-Y ahí estaba mi pequeña Ela, aún decía palabras sueltas, papa, mama, agua y poco más.

Los abuelos estaban insufribles por que mis bebes solo escuchaban palabras en ruso, mi padre era muy pesado con que le habláramos en italiano, mi suegro quería que las niñas aprendieran griego y nosotros pues hablamos en ruso o inglés.

-Es increíble que primero hayan dicho papá, yo las lleve nueve meses en mi vientre, eso es ser descaradas- dijo mi mujer apareciendo por la puerta.

Nuestra vida dentro del matrimonio era como si dos pareja de adolescentes enamorados, ahora creía en el amor puro.

-Amor son hijas mías que esperabas- dije sonriendo, ahora se la pasaban gateando, así que mandé a poner un protector en el suelo y por todas las puntas de los muebles, mis bebes eran muy inquietas.

-Almenos que tuvieran mis ojos- dijo ella sonriendo.

-Amor, almenos tiene tu pelo, yo me tengo que conformar con el carácter- dije sonriendo y acercándome a ella, lo mejor de mi vida estaba en esta habitación, mi mujer y mis tres muñequitas.

-Hoy se quedaran con los abuelos, para que tu y yo celebremos nuestro aniversario- dijo ella dándome un beso en los labios.

-Amor ¿y no seria mejor llevarlas con nosotros?-no me gustaba separarme de mis bebés.

-Mi amor, hay que hacer cosas y darnos los regalos, nuestras bebes se quedaran con sus abus, ¿si?- mi mujer tenía el mismo don que mis hijas, me ponían hacer lo que ellas querían.

-Esta bien amor, entonces hoy me visto en la habitación de invitados y quedamos en la entrada ¿te parece?- dije mientras la cogía de su pequeña cintura.

-Me parece mi preciosa bestia- dijo dándome un beso para ir a prepararse.

****

Mi mujer estaba radiante, preciosa le quedaba corto para como estaba vestida la mujer de mi vida. Reserve todo un restaurante de lujo, traje un chef exclusivo de uno de los mejores restaurantes de Grecia, queria que todo fuera mágico para estar con mi muñeca.

Todo estaba planeado para que la prensa no se presentara, ya que estaban muy pesados con la vida de nosotros.

Había seguridad pero también privacidad que es algo que realmente agradezco ya que queria intimidad con mi muñeca.

-Te he dicho lo hermosa que estás esta noche mi amor- dije corriendole la silla para que se sentara.

-Si esta y todas las demás noches mi amor- dijo mirándome con una intensidad, era increíble todo lo que estábamos compartiendo juntos.

-No sabes todo lo que significa este día, por este dia y por muchos más- dije levantado la copa para brindar, la vi coger la copa de agua en vez de la otra copa.