Casada Con La Bestia

Capítulo 26

Viviendo una hermosa realidad
ALTEA

Hoy me había echo la ecografía estaba tan feliz, tenía ganas de expresar mis sentimientos, ¡tres! Voy a tener ¡tres!, cuando Valentina miro la pantalla haciéndome la ecografía y vi que fruncia el ceño, se me paró el corazón, me imaginé todas las cosas malas que podían rondar por mi cabeza, llamo a una colega que era especialiata en embarazo múltiples y en ese momento me sentí morir, mis suegros me intentaban calamar aunque ellos también estuvieran preocupados, Valentina intentaba calmarme, era normal al saber que pasaba con mis bebés, cuando vino la otra doctora empezó el caos, empezaron hablar en rusos y mis suegros también empezaron alterarse, me imaginé lo peor, pero en realidad es una de mis más grandes felicidades, iba a tener tres princesita, solo que estaba escondida detrás de sus hermanas y es un poco más pequeña pero todo marchaba bien.

Cuando llegue a casa con Sergey y los otros guardaespaldas, mis suegros y Kostenka nose donde se había ido, subi las escaleras y fui directamente a mi habitación, abri la puerta que estaba pintada de rosa palo y miré el cuarto de mis bebes, ahora tendría que poner una cuna más, mis suegros, mis abuelos, mis amigos, mi padre y Kostenka le había comprado muchos regalos, era increíble, todo parecía un sueño hermoso, lo único malo es que mis sentimientos hacia el padre de mis bebes no habia disminuido. Me acosté en mi cama un poco para descansar del día tan agetrado que había tenido y fui cayendo en una nueve.

-Mi niña, despierta que tiene que comer algo- fui abiendo los ojos y la mire estaba parada al lado de mi cama con una linda sonrisa- vamos mi niña que ya he pedido que te hagan un sopa. Bajamos y estaban las chicas sirviendo la comida, las cosas aquí en casa se habían vuelto más armoniosa, aunque mi lado masoquistas extrañaba a mi bestia; me había comprado también un movil, volví activar mis redes y todo lo demás. Cuando comía, parecía una mujer que no había comido en su vida, pero podía aprovechar por que tenia a mis princesitas.

***
Estaba en el vestidor de mi habitación, estaba escogiendo un bikini para ir a tomarme fotos y broncearme un poco, es increíblemente bonita mi barriga? Tan recóndita y perfecta, baje y me encontré con Kos.

-Mi niña, ¿vas a la piscina?- dijo dándome una tierna sonrisa.- si mi niño te viera así, no te dejaría salir de la habitación, con lo posesivo que es- sonrío con nostalgia.

-Kos tu niño solo es un nene caprichoso con ínfulas de rey del mundo, y no quiero que hablemos más de él- susurre .

-Mi niña el ha estado m...- no la deje terminar.

-Claro la excusa más vieja y mala que existe, no quiero verlo ni escuchar su nombre, vamos Kos, quiero tomarme fotitos. Llevábamos un rato primero habia tomado un poco el solo y ahora estaba en una especie de cabaña que había un poco más lejos de la piscina donde se encontraban los lavabos, me quité la parte de arriba del bikini y como había un espejo empecé a sacarme fotos con mis brazos en mis pechos, Kos acaba de llegar con una toalla.

-Mi niña tienes que guardas reposo- me dijo Kos atrás mío, estaba tan concentrada, estaba muy guapa.

-Hay Kos, tengo que tomarme muchas fotos, has visto que preciosiosas salimos- dije muy contenta. Mi embarazo me habia puesto muy guapa y encima y encima me crecieron los pechos, en definitiva esta más hermosa que nunca, lo único malo y vergonzoso era que en algunos momentos sentía que ardía de deseo y en esos momentos tenía que masturbarme por que ni con una ducha de agua helada, y en que pensaba en esos momentos, en el sinvergüenza de Nikolay.

-Vaya vistas ¿no?-esa voz hizo que todo mi cuerpo se tenzara, después de varios meses que no lo veo viene como si nada y para ponerle más peso a todo esto, no quiere hijos y encima yo embarazada de tres. Yo en estos momentos no podía moverme, estaba en una especie de trance, solo se que si tengo que sacar la fiera que tengo dentro para defender a mis bebes lo haré y me importará muy poco como termine Nikolay.