OH MY GOSH!! Esto ta' fuerte (8 xD
Capítulo 9
Sam no estaba pensando mientras le subía aún más el vestido, dejando a la vista su ropa interior, mientras sus manos recorrían su vientre plano. Ella gimió y lo atrajo otra vez a su boca, y lo obligó a poner su mano en sus pechos. Cuando Sam tocó sus pechos y los acarició con suavidad, ella se arqueó bajo él soltando otro gemido. Sus pequeñas manos fueron directamente al cinturón de
su pantalón, y entonces como una luz, la mente de Sam volvió a ser consiente de los actos de su cuerpo. Se separó bruscamente de sus labios y se sentó en la cama, poniéndose la camisa.
-¿Estás loca? -le preguntó. Estaba tan agitado, le costaba hablar. La miró, ella con ojos de deseo, con sus labios rojos e hinchados, arreglándose el vestido. -No, olvida que pasó esto. Estás borracha.
-Sam... -dijo ella aún con deseo. Su voz sensual y atrayente excitó más a Sam, quien cerró los ojos fuertemente y respiró un montón de veces para no caer. -no te alejes, la estaba pasando bien.
-No, así no -dijo el finalmente. Ella no dijo nada, pero se quedó en la cama y le dio la espalda. Trató de no tomarla en cuenta, y fue al baño. Necesitaba relajarse y bajar las revoluciones. Estaba tan excitado y descontrolado, no sabía como fue capaz de detenerse. Se miró al espejo, sus labios rojos e hinchados, sus ojos brillosos, su frente tenía gotitas de sudor mientras que su pelo estaba totalmente desordenado. Se mojó la cara, pestañeó varias veces. Tuvo que pasar un largo rato en el baño esperando que su cuerpo se relajara. Ya saben, se le notaba mucho la excitación aún.
Cuando por fin pudo salir, ella se había dormido.
-Gracias a dios -susurró Sam. La miró, se veía tan bonita durmiendo. Sus labios seguían tan tentadores, rojos e hinchados, recordó como lo besó, la forma en que lo hizo sentir. Sam se mordió los labios, se acercó a ella y presionó sus labios contra los de ella. Ella no hizo nada, solo siguió dormida. Sam suspiró largamente y sonrió.
Entonces tocaron el timbre, alarmado corrió escaleras abajo, ya un poco menos mareado, y abrió.
-Hey bro, ¿cómo estás? -Finn le sonreía despreocupado.
-H-hola -dijo nervioso. Finn se percató de inmediato.
-¿Te interrumpí? -preguntó mirando la botella de vodka vacía, con los dos vasos. Sam se rascó la cabeza nervioso.
-Eh no, pasa -dijo Sam. Finn era su mejor amigo, pero tampoco sabía sobre cuanto amaba a Quinn, nunca quiso contarle, sentía que era patético.
-Sam, de verdad, si hay una chica arriba yo me voy -dijo Finn riéndose. Sam miró hacia todos lados. -espera... si hay una chica ¿no?
-Yo... -el cuerpo de Sam estaba tenso.
-Tus labios -dijo mirándolo de cerca -están hinchados ¿a quién te estás tirando? Hueles a alcohol -se burló Finn.
-A... nadie, no me he tirado a nadie -dijo Sam, en cierta parte era cierto.
-Espera... -Finn miró un bolso encima de la mesita. Sonrió travieso y miró a Sam, quien quitó el bolso de golpe, pero no pudo evitar que la billetera de la muchacha cayera al suelo. Finn fue más rápido y tomó la billetera, la abrió y vio la identificación de Quinn. Abrió los ojos de par en par, lo miró de la cabeza a los pies. -¿Quinn?
-Shh... -pidió Sam -está durmiendo, está borracha.
-¿La emborrachaste? Pervertido -lo fulminó con la mirada.
-No saques conclusiones Finn -lo amenazó con la mirada también.
-¿Qué no saque conclusiones? Sam, estás sudado, labios hinchados, pasado a alcohol, y ni siquiera sabes ponerte bien el cinturón -lo miró. Sam se avergonzó, estaba mal puesto. -¿te acostaste con Quinn?
-¡No! -Dijo alarmado -Está bien, siéntate y te contaré lo que pasó -lanzó un pesado suspiro.
-Solo responde esto antes de comenzar -dijo Finn mientras se sentaba. -¿te gusta Quinn? -Sam no podía ocultarlo más a su mejor amigo, quizás era el mejor actor frente a todos, pero Finn lo conocía demasiado bien. Sam lo miró fijamente.
-No me gusta... -suspiró -estoy enamorado de ella -confesó