Alexa
El sol de Los Ángeles brillaba mucho más que en donde vivía.
Todo es diferente en este lugar.
La comida.
La gente.
El tiempo.
Aquí nunca llovía.
Me gustaba estar mucho aquí, y si hablamos de los pisos.. mucho más amplios que los de mi barrio.
Me encantaba Los Ángeles, no me podía quejar en ningún momento de la convivencia.
De lo que me quejaba es de mi sueño de ser modelo.
Cuando llegué aquí, Clemente, el fotógrafo de Beatrice me hizo unas fotografías espectaculares para mí book fotográfico.
Se las enseñe a los seleccionadores y me cogieron pero el problema es mi peso.
Pesar sesenta kilos en el mundo del modejale equivale a estar gorda aunque no lo estuviera y tuve que ponerme a dieta.
Perdí ocho kilos en estos cuatro meses.
Me encontraba muy delgada pero tenía que llegar a cuarenta y ocho kilos para poder modelar en la pasarela de Victoria Secret.
Un sueño que quería cumplir a toda costa pero mi alimentación era penosa..
Apenas comía, me saltaba muchas comidas, y eso me hacia sentir triste la mayoría del tiempo pero Beatrice me apoyaba en todo momento.
Lo que había conseguido es salir en una marca de ropa desconocida promocionando una cuenta de Instagram y ropa de lencería en una revista, otra marca de lencería de baja calidad.
Pero no conseguí lo suficiente.
El próximo pase de modelo sería en junio, ahí sería cuando podré modelar, y mi carrera comenzará de una vez por todas.
Beatrice, claramente fue la que me consiguió poder modelar en Victoria por tanto contactos que tenía.
Aunque ahora las estrellas o modelos más famosas eran Micaela una chica brasileña, Chiara que es de Italia y Emily que nació en Londres.
Esas tres chicas nunca faltaban a ningún pase de modelo, las demás, simplemente son especies de teloneros, o para rellenar el show.
Yo quería tener uno de esos tres puestos, ser una modelo fija.
Mientras tanto podría dedicarme a hacer promoción a otra marca..
Y seguir con mi dieta, prepararme día a día el pasaje de modelos que tenían preparado en junio en Milán.
En Milán, aún no podía creerlo.
Pero Beatrice hacia todo por mí.
Es un sueño agridulce.
Pero más vale que siga luchando e intentándolo hasta que lo consiga.
El problema era cuando caí la noche.
Christopher me venía a la mente y tenía grabado a fuego el último día que estuve en su casa.
Mis sentimientos por él no había cambiado.
No habían cambiado en ningún momento, le seguía queriendo como siempre, y no me había olvidado de él.
Tal vez el que se había olvidado de mí es él.
Ni si quiera me llamo pidiéndome perdón, le dio igual en absoluto, y eso me hizo sentir como una mierda.
A día de hoy sigo dolida con él, pero cuando el sol llega a Los Ángeles..
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Lo que siento por ti es amor
RomansaDos jóvenes llamado Christopher (23) y Alexa (22) se conocen de forma normal pero desarrollan una relación de una manera extraña. A medida de que su relación se va avanzando, uno de los dos va generando sentimientos que nunca había experimentado, y...