Capítulo 13 Lo que sea necesario.

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-Esta semana ha sido de locos- menciona Daniela, quien salía del cuarto de baño enfundada en su pijama lista para meterse a la cama donde María José ya descansaba- pero, sobre todo, debo reconocer, la habilidad de planeación de Valentina, wow, tu hermana es una digna hija-no-hija de mi madre.

-Pensé que solamente yo había visto esa remembranza- comenta Poché despegando la vista del libro que leía y quitando sus gafas de lectura para colocarlas sobre el libro en la mesa de noche- ¿Cómo te sientes con respecto a mañana? Aun estas a tiempo de arrepentirte.

- ¿arrepentirme? -enarca su ceja- ¿Acaso te quieres deshacer de mí?

-Daniela es en serio, es un paso muy grande para ambas, yo lo hago por mi empresa y mi familia, pero ¿tu? A ti nada te ata a esta locura.

-Te equivocas Pochecita, yo también hago esto por mi empresa y mi familia- le toca la punta de la nariz con su dedo índice- después de la muerte de mamá, esto le inyectará seguridad a la casa de modas, además de que la fusión que estamos preparando nadie se la espera y esa nos hará llegar todavía más alto, pero sobre todo, le dará a mi padre la tranquilidad de retirarse sin preocupaciones y listo para recorrer el mundo junto a su mejor amigo-apaga las luces de las mesas de noche y se abraza al pecho de la pelinegra- aunque debo reconocer que si estoy algo nerviosa.

- ¿por?

-No quiero defraudarte ni romper las expectativas que tengas de este matrimonio exprés.

-Creo que ninguna de las dos tiene expectativas reales de este matrimonio, somos dos simples amigas, porque créeme Daniela Calle que después de todo lo que hemos vivido en las últimas semanas yo si te considero mi amiga, de hecho, eres mi única amiga, pero regresando al punto, somos dos simples amigas que se están apoyando mutuamente y que dejaron todo claro en un acuerdo prenupcial, nada puede salir mal, ahora durmamos que mañana nuestro día comienza a primera hora.

En el jardín de la residencia Garzón se podía encontrar un gazebo rústico rentado, adornado con flores de temporada y luces que le daban un brillo especial conforme la tarde iba cayendo; sillas plegables de madera adornadas con un mono bicolor en el respaldo; piscina tapada sirviendo como área de comedor donde se colocaron las mesas donde se serviría la cena después de la ceremonia civil; en la cocina el chef contratado con su equipo de cocineros preparando el menú elegido por las chicas y los camareros sirviendo bebidas y canapés para comenzar a servir a los invitados que de poco llegaban.

En la habitación de María José, esta se encontraba acompañada por su hermana y una maquillista que se encargaba de darle los últimos toques al maquillaje elegido para tan memorable ocasión. Una vez su labor terminó salió de la habitación dejando a las hermanas solas.

- ¿emocionada? -pregunta Valentina con una sonrisa en su rostro denotando la enorme felicidad y satisfacción que sentía en ese momento por haber logrado organizar una boda desde cero en cuatro días.

-Más bien aturdida por todo lo que está pasando tan rápido- se coloca frente al espejo y se observa detenidamente: cabello alisado completamente, pendientes de brillantes largos, maquillaje sencillo pero con unos labios rojos que resaltan, mono halter cuello redondo en color blanco, espalda descubierta dejando a la luz un tatuaje de las fases de la luna que le recorre la columna vertebral pero que en lugar de tener una luna llena al centro tiene un corazón hiperrealista, saco blanco a la medida para después de la ceremonia, tacón de aguja que le brinda fácilmente diez centímetros de altura y en una de las bolsas del pantalón la cajita con las argollas matrimoniales que a partir de esa noche tanto Daniela como ella portarán como símbolo de su unión- te luciste con el traje hermana, felicidades.

-Con el cuerpo que te cargas lucirías bien hasta con una bolsa de basura- se ríe y la toma con cuidado de los hombros, aún continuaba con el yeso y el cabestrillo en el brazo derecho- ¿lista para ver a tu futura esposa, decir sus votos y sellar la unión con un beso de amor?

Caprichos del corazónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora