18.

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-Lo admito, venir hasta aquí fue una muy buena decisión- Yongsun dice mientras recupera el aire y toma un bocado del algodón de azúcar que sostiene en su mano.

Moonbyul observa cómo su novia lucha con la bola de azúcar morada y trata de limpiarle las comisura de los labios, sin éxito alguno por supuesto, Yongsun era un completo desastre.

Luego de pasar casi dos días encerradas en el apartamento, Moonbyul casi obligó a Yongsun a que fueran a la feria que estaba cerca, le dijo que sería buena idea revivir viejos tiempos y la verdad es que no se equivocaba.
Yongsun al principio se había negado y había hecho un pequeño berrinche alegando que la feria era un lugar al que iban muchas personas y estar rodeada de tantas la llenaba de ansiedad.

Por supuesto que todos los "peros" desaparecieron cuándo vio todos aquellos juegos y comida. Si había algo que Yongsun amara más que a Moonbyul ,era eso. Comida y diversión.

-Pero la señorita "ya no tenemos 15 años para andar en esas cosas" no quería venir y me hizo rogarle casi el día entero- Era el turno de Moonbyul para recliminarle medio en broma, pues la verdad es que había estado a punto de abandonar la idea y no ir, la actitud de Yongsun la había frustrado un poco.

Aunque era un poco obvio que el enojo y cualquier cosa que había sentido por la tarde ya se le había ido, luego de ver a su novia tan feliz disfrutando cómo niña de todo aquello.

Ahora Moonbyul sentada al lado de aquella mujer que ahora era castaña  y comía algodón de azúcar cómo si no hubiera mañana, disfrutaba de la noche, de las luces que había por todo el lugar, los gritos de emoción generados por los juegos mecánicos, la risa de los niños al correr de un lado a otro, la brisa de la noche.

Con una mano jugando de manera distraída con los hilos sueltos de su jeans y la otra sosteniendo la mano de Yongsun, Moonbyul supo que no había mejor lugar que ese.

-¿Luego de comerme esto, me puedes comprar una Coca?- quien diría que una mujer de casi 26 años podía hacer unos pucheros tan lindos y no ser consciente de toda la azúcar que estaba consumiendo.

-Si vale menos de un dólar, te la compro. Además ¿no es eso demasiada azúcar para tu cuerpo y sangre? - Moonbyul era tacaña, pero también era una tacaña preocupada por la salud de su novia - y a todo esto ¿qué hay de tú dinero? Dejaste que pagara todo yo, a este paso voy a quedar en la quiebra, no abuses Yong.

-Si vale menos de un dólar compras dos, una para mí y la otra para ti, no pienso compartirte de la mía. Si te preocupa el azúcar no hay problema, luego ME COMPRAS algo salado para nivelar las cosas- Moonbyul era una tacaña y Yongsun una cínica que disfrutaba de pelear y ser consentida por la tacaña- No tengo dinero, se acabo mientras trataba de pagar todas las cuentas pendientes. Y deja de llorar, apenas y has gastado 30 dólares.

-Quisiera que fueran 30, ya va medio salario de un mes y todavía no cenamos. De todo lo que has comido no me has dado ni un poco y eso que yo lo pague- Moonbyul no sabia el porqué estaban teniendo esa pequeña "discusión" pero era entretenido pelear por dinero que a ninguna de las dos le hacía falta -Y no seas mentirosa, tus cuentas se están pudriendo en cifras, no trates de mentir...

"ENTREN, ENTREN, COMPREN SUS ENTRADAS ANTES DE QUE SE ACABEN, EL CIRCO DE LOS HERMANOS POCO PELO LES INVITA A VIVIR LA EXPERIENCIA, NO SE QUEDEN FUERA DE ESTE MUNDO MAGICO, APROVECHEN NO TODOS LOS DIAS UN CIRCO DE NUESTRO NIVEL VIENE A ESTOS RINCONES, LES GARANTIZAMOS ENTRETENIMIENTO Y SI NO, LAS PAREJAS QUE ENTREN SE PUEDEN BESUQUEAR EN LO MAS OSCURO, NO PIERDAN LA OPORTUNIDAD"

Moonbyul no pudo seguir con su discusión gracias al susto que les dio aquel payaso que hablaba con gracia y trataba de que la gente entrara a su show. Después de brincar por el susto rieron con ganas por las ocurrencias del hombre disfrazado. Riendo se levantaron de la banca y al pasar al lado del payaso este les obsequió un globo "no es gratis tienen que entrar, tortolitas" les dijo con gracia mientras hacía sonidos de besos y con sus manos copiaba la forma de labios para así juntarlos entre sí, provocando el rubor de las mujeres.

Silencio (Moonsun) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora